La antigua estación de trenes de la capital del Estado, ubicada en la avenida Héroe de Nacozari, construida en 1939, y que representaba un vestigio de la era de modernidad en aquella época, fue demolida como parte del proyecto del Tren Maya.
Trabajadores del Grupo Carso con una retroexcavadora dejaron en escombros lo que actualmente servía como bodegas y talleres a cargo del Fondo Nacional del Turismo (Fonatur), aunque durante muchos años estuvo en el abandono.
A temprana hora los trabajadores cerraron parcialmente un carril de esta avenida, frente a las instalaciones del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Campeche (Smapac), para introducir la maquinaria pesada. Una mano de chango derribó muros y techos del emblemático edificio.
Algunos historiadores e investigadores citan que este inmueble cuando fue construido por Ferrocarriles del Sureste, comprendía cuatro mil 70 metros cuadrados. Era la principal estación ferroviaria de Campeche e incluía bodegas, unidad médica y talleres. Llegó a ser un punto importante para el intercambio comercial, el abasto y el transporte de personas entre las comunidades del interior del Estado y a nivel regional y nacional.
La demolición inició con las bodegas, uno de los tres edificios principales de esta estación ferroviaria, donde almacenaban productos como semillas, animales, acero, cal, chicle, madera y otros, que se requerían comercialmente en distintos Estados. Este edificio fue remodelado en 1980. El área que estaba destinada a los talleres donde daban mantenimiento a vagones y locomotoras, aún no lo tocan. No se sabe si también será demolida.
Estas bodegas estaban prácticamente sobre la avenida, sobre el nivel del suelo y en su perímetro se encontraban las áreas de circulación resguardadas por los voladizos de concreto armado y contaba con muros divisorios en su interior, como si fueran locales comerciales, por sus accesos de cortinas metálicas. Estos edificios usados como almacenes fueron invadidos por hijos de ferrocarrileros.
La estación funcionaba para ascenso y descenso de pasajeros que utilizaban el tren como medio de transporte, para trasladarse a los diferentes Municipios del interior del Estado, así como a otros Estados de la Península y del país.
Cuando construyeron la estación ferrocarrilera, el espacio se encontraba deshabitado, y se le llamó a la zona como Cuatro Caminos, debido a que los rieles del tren que estaban cerca de la estación central atravesaban cuatro importantes vialidades que comunicaban estratégicamente a varios puntos de la ciudad.
Más historias
SIN SOLUCIÓN PARA TIERRAS EXPROPIADAS POR EL TREN MAYA: PROPIETARIOS CONTINÚAN EN PROTESTA
CALAVERITA: MIENTE, INSULTA Y SOBAJA
EL ACTO ATROZ DE MORENA DE DESAPARECER ÓRGANOS AUTÓNOMOS ES PARA ESCONDER INFORMACIÓN Y COSTOS DE PROYECTOS: PAÚL ARCE