Cuarenta y siete casas históricas que son un grave peligro para la población han sido detectadas al 30 de septiembre del 2022, informó el jurídico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Campeche, Jorge Alberto Aguilar Montero.
Explicó que en la vivienda ubicada en la calle 53 del Centro Histórico, Protección Civil Municipal y Estatal acordaron demoler las partes a punto de desplomarse, para evitar daños a la población, pues aún no localizan al propietario.
Para atender esta problemática, fue creado un comité integrado por la Autoridad del Patrimonio Cultural del Estado de Campeche, perteneciente al Gobierno Estatal; Protección Civil Municipal y Estatal y el INAH.
El objetivo es intercambiar información relacionada con los siniestros que pudieran presentarse en la zona histórica, y detectar los inmuebles que datan entre los siglos XVII y XIX, que pudieran ser un peligro para la población, para determinar las intervenciones necesarias.
Aguilar Montero recordó que la ley sólo faculta la intervención del INAH en algunas situaciones, por ejemplo, cuando un inmueble ya representa grave peligro, es decir, tiene características para un desplome, ante lo cual es presentada la denuncia formal ante el Ministerio Público Federal por destrucción del monumento histórico.
Se agotan los lineamientos necesarios para localizar al propietario, a quien exhortan a tomar medidas preventivas, y otorgan todas las facilidades para comenzar los trabajos pertinentes. A una persona le han hecho hasta tres llamadas de atención o notificaciones en diferente temporalidad, antes de interponer denuncia formal.
De enero al 30 de septiembre pasado, el INAH envió 47 notificaciones o avisos dirigidos a dueños para intervenir sus inmuebles, debido a que representan alto riesgo, y se ubican en la colonia Centro y barrios tradicionales como San Román, San Francisco y Guadalupe. De las 47 casas clasificadas en riesgo, 25 están en el Centro Histórico, precisó.
Sólo algunos propietarios siguen haciendo caso omiso al INAH por diversas causas, ya sea por radicar en otros Estados, estar de viaje o no tener los recursos económicos para realizar la remodelación o mantenimiento.
En cuanto a la casa del barrio de Guadalupe cuyo techo se desplomó mientras la fachada está en buenas condiciones, comentó que está cerrada y no estaba en abandono, pues los propietarios le realizaban las intervenciones necesarias.
Sin embargo, aún investigan las causas del incidente, aunque los primeros indicios señalan que el agua de lluvia se acumuló al no estar limpios los desagües.
Dicha propiedad no amerita acordonamiento de precaución, ni otras señaléticas, pues la fachada está en buenas condiciones, aún así, se sugirió al propietario comenzar a la brevedad los trabajos necesarios.
De la vivienda ubicada en la calle 53, entre 16 y 14, donde Protección Civil colocó cintas amarillas de prevención y cerró un tramo para impedir el paso de transeúntes y automóviles, subrayó que ya fueron los arquitectos del INAH a inspeccionar, pero no han localizado a los dueños.
Protección Civil Municipal y Estatal acordaron medidas preventivas como la demolición de las partes que están por desplomarse, a fin de evitar daños, pero lo harán bajo supervisión del INAH.
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