Los Aysa, simbiosis de corrupción

Son el desprestigio más grande de Campeche: García

Comparten el ADN de la corrupción y traición. Carlos Miguel Aysa González prostituyó a su hijo Carlos Miguel Aysa Damas para no perder la embajada de México, y ambos son el desprestigio más grande a nivel internacional de Campeche, uno como diputado federal por Morena y otro diplomático de la 4T, representan una simbiosis putrefacta de corrupción e impunidad, aseguró el secretario Regional del CEN del PRI, Luis Alonso García Hernández.

Aysa González, sin cumplir con el perfil ni contar con experiencia en materia diplomática, aunado a los graves señalamientos de corrupción que la gobernadora morenista, Layda Sansores San Román ha exhibido, fue nombrado por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, embajador en República Dominicana, como canje de la gubernatura de Campeche y un voto en la Cámara de Diputados, tras la traición de su hijo Carlos Miguel Aysa Damas.

Éste (por Damas Aysa), traicionó al PRI para cuidar el puesto de su padre Aysa González, el gobernador sustituto que lo impuso como diputado federal plurinominal.

Entre Aysa González y su vástago Aysa Damas, lograron el más grande desprestigio de Campeche a nivel internacional, pues su nombramiento como embajador ha sido el más cuestionado, y para lograr la impunidad diplomática, ambos se desenmascararon como morenistas para lograr sus intereses. 

De administrador del hotel “El Navegante”, ubicado en el Centro Histórico, un verdadero monumento de la corrupción que Aysa González compró con el saqueo a los campechanos y puso a nombre de su esposa Victoria Damas, el novicio de la política saltó a la Cámara de Diputados, y de ahí se consagró como su padre de traidor y corrupto; llevan el mismo ADN.