Por: Ernesto Castillo
Ya terminó la Semana Santa, y Layda sigue pagando por los pecados de Marcela. A diferencia de Jesús, su viacrusis todavía no ha terminado.
La Gobernadora pasó una Semana Santa que nunca va a olvidar, pero no precisamente por la ya histórica huelga de policías que ha provocado la mayor crisis política que se recuerde en Campeche, sino porque no pudo salir de vacaciones y tuvo que quedarse trabajar, tal y como ella misma se quejase en días pasados.
¡Qué difícil debe ser Layda Sansores en estos momentos! Qué difícil debe ser darse cuenta que los problemas reales no se resuelven solo utilizando las frases del mejor presidente de la historia de México.
Qué difícil debe ser ver que tenemos al segundo presidente más popular del mundo, y que aún así, se vaya a realizar una megamarcha de más de 20 mil personas en contra de ella y en contra Morena.
Qué difícil debe ser darse cuenta de que ya eres parte del problema, y no de la solución.
Lo de Layda ya debe ser masoquismo. No hay otra explicación lógica para justificar lo que estamos viendo. Lo que ha sufrido por gusto, y lo que todavía le falta por sufrir.
Este lunes estallará la huelga en la UAC tras cinco meses de oídos sordos por parte del Gobierno. El personal académico de la Universidad ya anunció que se suspenderán actividades a partir de mañana. ¡Otra huelga que se pudo haber evitado!
Tal y como lo advertimos, los trabajadores universitarios ya tendrán una razón más para sumarse abiertamente a la megamarcha del 13 de abril. Como ciudadanos en respaldo de su policía, y ahora también como sindicalizados en defensa de sus derechos laborales.
Para colmo de males, en cuestión de pocas horas, se da a conocer la noticia de una explosión en una plataforma de Pemex que ha dejado al menos una persona fallecida, y de un motín de reos en el penal de Ciudad del Carmen. ¡Vaya semana que le espera a la Gobernadora!
Para evitarle más inconvenientes, respetuosamente le sugerimos cancelar su Martes del Jaguar. El horno no está para bollos, y no vaya a ser que con su incontinencia verbal tan característica se le salga un saludo a las madres de los sindicalizados de la UAC.
O que la canción que compusieron para solucionar la huelga de los policías no vaya a ser del agrado del respetable y baje la audiencia de su tan vulgar programa de variedades, que para usted equivale a reuniones de trabajo con su gabinete.
O que en su cómica personificación involuntaria de la “India María” diga algo que pueda ser malinterpretado por el pueblo bueno y sabio.
O que el poema dedicado a los policías no vaya ser igual de emotivo a los que zalameramente le escribe de puño y letra al “Gandhi mexicano”.
Ojalá que el espíritu del Jaguar de la selva maya, a pesar de que le hayan talado 10 millones de árboles de su hábitat natural, le dé la fortaleza para atravesar estos días aciagos.
“Ánimo”, así como dice el presidente antes de cada mañanera.
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