Lo Cortés no quita lo corrupta

Una vez más, el Gobierno de la nefasta y perversa Layda Elena Sansores San Román se apresta a encubrir presuntos actos de corrupción de su nueva protegida, como pago por haber renunciado al PRI y haberse afiliado a Morena…

Como una bofetada a rajatabla recibieron los calkinienses la designación de la exalcaldesa Juanita Cortés Moo como nueva titular de la Gerencia Estatal de la Financiera para el Bienestar, ya que pesan en su haber varios expedientes por presuntos desvíos de recursos y aún están pendientes cuentas por aclarar del ejercicio fiscal 2024.

Una vez más, el Gobierno de la nefasta y perversa Layda Elena Sansores San Román se apresta a encubrir presuntos actos de corrupción de su nueva protegida, como pago por haber renunciado al PRI y haberse afiliado a Morena en la mitad de su periodo administrativo como alcaldesa. Algo que por cierto, no les resultó redituable electoralmente, ya que el partido oficial perdió ese Municipio, como castigo, precisamente, por el pésimo desempeño que tuvo la hoy funcionaria federal.

Es cierto, algunas posiciones del Gobierno de la República no pasan por el escritorio de la farsante gobernadora Sansores, y hasta puede afirmarse que muchas de sus recomendaciones no reciben el visto bueno de la Presidencia, por lo que son enviados al bote de basura, pero sin duda alguna que en el caso de Juanita, tuvo que haber intervenido la mano de la senecta mandataria, pues de lo contrario ya había manifestado de alguna manera su desacuerdo, como ocurrió con la inclusión de Manuel Zavala Salazar en el Comité Ejecutivo Nacional de Morena.

Y es que cobijar a una exalcaldesa con tan negros antecedentes, también lo han percibido los morenistas como una cachetada a ellos mismos, y el pisoteo, una vez más, de sus principios de no mentir, no robar y no traicionar, lo cuales por cierto no se han cumplido desde el inicio de la llamada 4T, pues sus principales representantes o provienen del PRI, o del PAN o de alguna otra agrupación que jamás luchó por los ideales de López Obrador, y que por tanto, no siente como suyos esos principios y tampoco se creen obligados a ajustarse a sus lineamientos.

En este contexto, tanto traiciona quien avala el nombramiento de estos oscuros personajes, como quien lo recibe, pues tal vez intencionalmente dan muestras públicas de incongruencia, incoherencia y contradicción, para que el pueblo también les dé la espalda ahora, y más adelante en las urnas.

No nos olvidemos que quien dio a conocer la designación de Juanita Cortes Moo en la Gerencia Estatal de la Financiera para el Bienestar, es el expanista José Cardozo Rivero, quien tuvo responsabilidades en la Delegación Agraria del Gobierno Federal durante la administración del llamado espurio (por los morenistas) Felipe Calderón Hinojosa, y decenas de campesinos lo acusaron por despojo de tierras. Si las investigaciones en su contra no avanzaron es por la impunidad de que gozaron los priístas y panistas cuando fueron Gobierno y que ahora se extiende al morenismo o a la llamada 4T.

Es decir, todo es más de lo mismo. Se mantienen lo mismos, luego entonces, harán lo mismo, en perjuicio de ese pueblo noble y sabio que, lamentablemente se  tragó la promesa de una “cuarta transformación”, que ha traído solamente retrocesos e impunidades como este caso confirma.