En las Tripas del Jaguar: 8 de agosto de 2023

GRAVE ACUSACIÓN DEL SESO LOCO. 

Quienes conocen desde niño al Seso Loco y vieron el video de su compungida actuación en las escaleras del Congreso, debieron recordar cuando participaba en concursos de declamación y lloraba en el escenario al recitar. Desde entonces era un artista, pero ¿en calidad de qué acusó a Eliseo de ser un asesino en serie que usa al Estado para generar caos y violencia?

Casi llora al referirse al atentado a Yamile Moguel y su esposo Rafael. Dijo que el fiscal tiene identificado al asesino material, mas no al intelectual, que no hay inseguridad y que lo que está haciendo Marcela “es extraordinario”, pero pese a contar con tanta información privilegiada, no sabe dónde está su tía gobernadora, ni quién se quedó a cargo de su oficina.

Quien acusa está obligado a probar, y las acusaciones de Seso Loco contra Eliseo son muy graves. ¿Dónde están las pruebas? Debe apurarse a mostrarlas porque se asegura que del cuarto piso salió la orden de cortar las alas a quien ya se sentía candidata a alcaldesa de la capital. La hipótesis crece cuando se considera que Seso Loco promueve a Liz Hernández Romero para esa misma candidatura, que su tía está de viaje, y que quien despacha allá arriba es él. ¿Le saldrá el tiro por la culata?

MÁS DUDAS EN TORNO AL ATENTADO. 

Conforme pasan los días, crecen las teorías del atentado a Yamile Moguel y su esposo. Nos comentan que previamente había pedido seguridad a la gobernadora, quien ordenó a “la extraordinaria” Marcela asignarle policías de guaruras. Incómoda por tener escoltas pisándole los talones, con los cuales era déspota y grosera, pidió que se los quitaran. ¿Por qué temía por su vida?

Hasta hoy, la Fiscalía tampoco ha aclarado la versión de los testigos oculares de que el esposo de Yamile, Rafael, portaba una pistola calibre 45, en la cual habría rebotado una de las balas que le dispararon y que se habría desviado hacia su columna. Amigos cercanos a él confirman también que portaba pistola. ¿A qué se dedicaba que tenía que estar protegido y armado?

La versión que corre es que quien perpetró el atentado del viernes fue “La Pincita”, quien el sábado, menos de 24 horas después, fue ejecutado en San José El Alto, pero que alcanzó a defenderse y logró herir a su ejecutor, una persona que luego fue “encontrada dormida” por la policía en una banca en Santa Lucía, y que conforme transcurren, salen más preguntas. A ver qué dice mañana el fiscal.

ANÍBAL, MENTIROSO Y CORRUPTO.

Nada cierto dijo en su video del Segundo Informe el chiapaneco Aníbal Ostoa Ortega. Como buen morenista, ya aprendió el arte de mentir. “En este Gobierno de Todos se atiende y dialoga con campesinos, pescadores, empresarios, líderes sindicales y transportistas para garantizar la gobernabilidad…” ¿Ahhh siii? ¿Atendió a los campesinos que fueron la semana pasada a reclamar sus caminos saca cosecha? No. ¿Atendió a los transportistas que repudiaban la nueva Ley de Movilidad? No. ¿Por qué miente?

Luego afirmó que “se acabó la corrupción en los registros Civil y Público de la Propiedad…” ¿Ahhh siii? Y si había corrupción, ¿a quién denunció? A nadie. ¿Por qué? Porque es mentira, al igual que su nombramiento de secretario de Gobierno, pues en realidad es un patiño del Seso Loco. Por último, se aventó a decir que se cumple con lo ordenado por la gobernado- ra de “más territorio y menos escritorio”. Con trabajo camina hasta la oficina y ahora dice que recorre el Estado.

Ostoa Ortega no ha perdido la oportunidad de beneficiarse del Gobierno, y para prueba ahí está el millonario contrato que se asignó para suministrar alimentos al reclusorio de Kobén, a través de una empresa que aparece a nombre de un entenado suyo. ¿Eso no es corrupción? Una raya más al cintareado jaguar.