EN LAS TRIPAS DEL JAGUAR: 09 ENERO 2025

PRIMERO OSTOA, AHORA TOLEDO.

Se rumoraba hace cuatro semanas que no tardaba en caer el secretario de Gobierno, Armando Toledo Jamit, que al igual que pasó con Anibal Ostoa Ortega en su momento, resultó ser muy incómodo a los negocios del polémico exdrogadicto sobrino Seso Loco.

Junto con el titular de Finanzas, Jezrael Larracilla, y su concubino, Luis Ángel Hernández, lo culparon de echar para atrás el “impuesto cedular” que pretendía imponer la goberladrona Sansores antes de tomar sus largas vacaciones. De acuerdo a esos tres personajes, se pudo imponer la aplanadora morenista para aprobar el mentado impuesto, con el que recaudarían más de 60 millones de pesos para el “gasto corriente”, que desviarían pagando facturas apócrifas a las cuentas de sus empresas, para luego repartírselo equitativamente.

Molestos porque Toledo habría sugerido a la goberladrona Sansores no cargar con el costo político de un nuevo impuesto, le armaron un complot con el cual vendieron el cuento a la nefasta anciana de que trabajaba para la oposición, no para su gobierno, que por su culpa habría problema para completar el presupuesto y que lo más conveniente era removerlo. Así de fácil se chingó el seso Loco a otro secretario de gobierno.

QUE VAYA Y DEMANDE A SU P.M.

Para ocultar el fracaso de su nefasto gobierno y sus nulos resultados, que tienen a Campeche en desaceleración económica desde hace tres años, la goberladrona Layda Sansores anunció en su ridículo y patético jaguar de esta semana que una vez mas había presentado denuncia penal contra Tribuna y Telemar porque según ella, la difaman.

¿Es mentira que la falta de estrategia de su gobierno acabó con la economía campechana y aumentó la pobreza? ¿Es mentira que en su gobierno aumentó la inseguridad y el desempleo? ¿Es mentira que la atención médica y el desabasto de medicinas continúa? ¿Es mentira que se la vive viajando en jets privados? ¿Es mentira que Marcela Muñoz fue culpable de lo sucedido en el motín de Kobén?

Seamos francos, ¿es mentira que tiene cabeza redonda, repintada de rojo, con postizos mechones naranjas, cejas negras y enorme boca botoxeada? ¿Es mentira decir que no está nada agraciada la señora? Si en este corruptísimo gobierno toda la verdad la califican como mentira, solo nos queda apelar a ese mismo poema de Saramago que tanto repite la goberladrona y añadirle ¡que vaya y demande a la PM que la parió!