EXPEDIENTE | INFANTIL DISPUTA POR CONTROLAR LA UAC

Como si no hubiera asuntos de interés público más importantes, resulta patético y hasta ridículo constatar todas las estrategias que ha puesto en marcha el nefasto y represor Gobierno de Layda Sansores San Román, para quedarse con el control total de la Universidad Autónoma de Campeche.

Mientras que el Estado sigue sumergido en el último lugar del desarrollo económico y se carece de estrategias claras, precisas y viables para la atracción de inversiones, la senecta Layda Elena sigue manipulando a jóvenes morenistas que cursan sus estudios en la UAC, para que resuciten a la extinta Fesauac, y asuman ellos el liderazgo.

Claro, la finalidad es utilizarlos —usando sus necesidades, principalmente de dinero— para convertirlos en los soldados que van a librar la batalla que se negaron a encabezar los cobardes diputados morenistas, petistas y verdes, para derrocar al rector, y devolverle esa importante veta financiera a la corrupta gobernadora y a su cada vez más ambicioso sobrino.

Mientras que el desempleo sigue en aumento, y la economía informal —los ambulantes— se han convertido en la única opción para que numerosas familias lleven el sustento al seno del hogar, la nefasta gobernadora, en lugar de apoyar a los emprendedores para que puedan financiar sus proyectos, prefiere gastar varios millones de pesos en conciertos para los jóvenes con artistas que cobran en dólares.

Dicen y dicen bien, que el exceso de circo y conciertos para esos segmentos estudiantiles, es la estrategia que está utilizando el ineficiente Gobierno de Sansores San Román para tener el control de ese sector poblacional. El propio vocerito Walther (con h) Patrón, confesó sus perversas intenciones políticas de manipular a los jóvenes, utilizando para ello el dinero público.

Se ha negado la perversa e ineficiente Sansores San Román a escuchar a los campesinos y ejidatarios que se oponen al cierre y traslado de las oficinas del Tribunal Unitario Agrario (TUA), pero en cambio da amplia voz en su asqueroso programa de los martes a un par de estudiantes morenistas que se presentaron como “reyes del Carnaval Universitario”, para despotricar otra vez, contra el rector José Abud Flores.

¿Por qué Layda se ha negado a encabezar las protestas campesinas por el cierre y traslado de las oficinas del TUA? ¿Acaso está de acuerdo en que se siga despojando a Campeche de lo poco que tiene, y que con ello se afecten los intereses de los campesinos campechanos? ¿Dónde quedó aquella Layda Sansores que (supuestamente) se oponía a todas las injusticias?

Con el paso de los años hemos llegado a descubrir que aquella “luchadora social” que le mentaba la madre a los senadores en su propia casa, en realidad portaba una máscara de la que se ha despojado para dar paso a su verdadero rostro: el de la frivolidad como gobernante, el de la represora que se cobra añejas revanchas con sus adversarios y críticos, corrompiendo a las instituciones oficiales que supuestamente deben estar al servicio de la ciudadanía.

Frivolidad de Layda Sansores que mostró con toda su crudeza al disfrazarse en las pasadas festividades de Carnaval de María Antonia Josefa Juana de Habsburgo-Lothringen, con toda una corte de lambisconas que le han hecho perder el piso, para adelantarle sus arrebatos de senilidad.

Y mientras que la gobernadora Layda Sansores se entrega junto con su corte de aduladores a sus “fantasías aristocráticas”, el Estado de Campeche se hunde cada día más en la pobreza, los hospitales siguen careciendo de médicos especialistas y medicamentos; las clínicas rurales siguen cerradas porque no hay personal que por lo menos recete Paracetamol a los enfermos, y la inseguridad, junto con las ejecuciones, se multiplican por doquier.

No hay visos de que la anciana gobernanta vaya a modificar el rumbo o por lo menos implementar alguna estrategia. Se tomó una semana de vacaciones después de sus ridículas fotografías con su aristocracia campechana, y este domingo formará parte de los acarreados que van a vitorear los anuncios de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, y la veremos de regreso hasta el próximo martes, para continuar con su show y su pasarela de ridiculeces, trastupijes y frivolidades. Por eso estamos como estamos.