¿Recibieron alguna instrucción de la gobernadora Sansores para traicionar a la presidenta Sheinbaum? ¿Es una demostración más de la pésima relación entre ambas? ¿O es acaso un desplante retador de nuestra anciana gobernanta?
Vía fast track, los diputados del Congreso del Estado de Campeche aprobaron la minuta de decreto mediante el cual se prohíben el nepotismo electoral y la reelección inmediata para los cargos de diputaciones, senadurías, Presidencia de la República, gubernaturas, diputaciones locales, presidencias municipales, regidurías, sindicaturas, jefatura de Gobierno, alcaldías y concejalías.
Pero nada tontos, los diputaditos campechanos, al igual que sus pares federales, precisaron que “la prohibición del nepotismo electoral será aplicable a partir de los procesos electorales, tanto federales como locales, a celebrarse en 2030, y la prohibición de la reelección de las personas servidoras públicas tendrá efecto en los procesos electorales federales y locales de 2030”.
De nada servirá que el partido Morena establezca en sus estatutos o en las bases para la selección de sus candidatos, que no se propondrá a los familiares de quienes tengan cargos electorales o a quienes quieran reelegirse. Hay vías para que los nepóticos y reeleccionistas consigan su objetivo, y la más socorrida será saltar al Partido Verde o al Partido del Trabajo.
En el fondo, los diputados locales campechanos, al igual que los morenistas verdes y petistas de las cámaras federales, traicionaron a su presidenta Claudia Sheinbaum, al no aprobar la iniciativa tal y como ella lo presentó. De nada servirán de aquí en adelante los encendidos discursos para halagarla, pues en los hechos prevalecieron sus intereses políticos y personales, más que la voluntad presidencial.
Mostraron su incongruencia en toda su crudeza, pues así como se apresuraron a aprobar una ley estatal sobre la reforma judicial, que estableció que jueces y magistrados estatales también serán electos mediante el voto popular, de esa firma pudieron establecer en la Constitución Política del Estado que la prohibición a la reelección inmediata y al nepotismo, entren en vigor en 2027 y no tres años después.
¿Recibieron alguna instrucción de la gobernadora Sansores para traicionar a la presidenta Sheinbaum? ¿Es una demostración más de la pésima relación entre ambas? ¿O es acaso un desplante retador de nuestra anciana gobernanta que revela que buscará postular a su hermanita Laura o a su sobrino Seso Loco?
No sorprende que el aprendiz de payaso y dirigente estatal de Morena, Erick Alejandro Reyes León, no haya secundado la propuesta de su lideresa nacional para que en el 2027, este partido no apoye a los reeleccionistas ni a los nepóticos. Ya sabemos que el trabajo del chilango es respaldar ciegamente todas las ocurrencias y barbaridades de la senecta y represora Layda Sansores.
Pero bueno, sería recomendable que de vez en cuando lean los comentarios de los ciudadanos campechanos en las redes sociales. Cada vez se incrementan las voces que prometen no darle ni un voto más a Morena, y mucho menos si entre los candidatos hay algunos de apellidos Sansores. Lean morenistas. Lean.
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