Desde hace muchos años ocurren atrasos en los expedientes de titulación y otros problemas
La postura de la rectora Sandra Laffón Leal y sus concejales al culparnos de las afectaciones a la Unacar son excusas y mentiras, porque sólo busca congraciarse ante la comunidad carmelita, denunciaron jubilados encabezados por Jesús Cervantes García y Manuel Hernández Rodríguez.
“Uno de los argumentos principales de la rectora fue culparlos de atrasos en expedientes de titulación, situación que desde hace muchos años sucede dentro de la universidad, aún operando con normalidad”, abundó.
De la falta de operatividad que alega el Consejo Universitario por la toma de Rectoría, todo lo que se maneja en pagos está en Vinculación Universitaria. Ellos hacen sus pagos, ahí cobran los alumnos y desde ahí hacen los demás movimientos.
“Tenemos entendido que hay facultades que están en contra de los directivos y han hecho algunos movimientos. Incluso protestas por sus títulos, pero no es nuevo”.
Acerca del atraso en la entrega de credenciales, en la universidad siempre ha ocurrido eso. Cuando los muchachos las pierden pagan y es un negocio redondo que ellos manejan. Lo único que les estamos perjudicando es que no tienen esos ingresos.
Al hablar sobre la afectación en la agenda de Sandra Laffon, afirmaron: “La rectora se la pasa tomándose fotos y en todas las facultades hablando. Dice que ella es la máxima representante de la ética y que apoya a la mujer”.
De los perjuicios contra Comunicación Social, porque no pueden usar computadoras y tripiés, pobrecitos. Imaginamos que sólo eso lo que hay aquí en la Rectoría. Pero que vengan, que se presenten con nosotros y dialogamos, que nos expongan sus propuestas.
“Asimismo, es mentira la supuesta disponibilidad de los concejales hacia nosotros. Hemos buscado por todos los medios platicar con ellos para resolver este problema, enviamos oficios, documentos en donde le pedimos audiencia para resolver esta situación económica y nada ocurre”.
Hace dos días, durante una reunión de la denominada comisión mixta, la rectora Laffón nos corrió al decirnos que no somos bienvenidos. Nos corrió de una manera vulgar.
“Ella sólo reitera que no hay dinero para nosotros pero no tenemos por qué soportar ninguna humillación de su parte”.
De todos los puntos que habla su queja, le dijimos que la máquina que toma fotos para los muchachos no sirve, ahí lo mencionan, es una cosa ridícula, cómo la va a utilizar.
“Que no la dejamos entrar a la Rectoría y que frenamos la educación de los alumnos, es falso. Mientras la rectora no nos responda y nos pague las quincenas que nos debe, aquí estaremos”.
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