Este nefasto, pésimo y corrupto Gobierno de “Todos los rateros”, tiene despensitis aguda, y cree que todos los problemas sociales se resuelven regalando despensitas…
Después de un tormentoso fin de semana en la capital del país, la Tía Rata reapareció en la comunidad de Lerma para reunirse con pescadores afectados por el vendaval que trajo consigo el huracán Milton, a quienes entregó una despensita “para que se ayuden” en lugar de presentarles proyectos de desarrollo para este importante sector.
—“Pide mucho, respetado maestro don Julián —respondió con extraña seriedad el bolero don Memín—, recuerde usted ese apotegma que dice que ‘de la abundancia del corazón habla la boca’, que le pudiéramos aplicar a la viejita paseadora diciéndole que si de la abundancia del presupuesto hablaran las despensas que entrega, éstas deberían ser de primera, no como esas ’chan bolsitas’ que entregó de frijol con gorgojo”.
—costas por los fuertes vientos del huracán Milton, y no creo que los afectados vayan a recuperar sus pérdidas con una miserable despensita, apuntó de nuevo don Julián. Ojalá que al menos les financien la adquisición de nuevas embarcaciones o por lo menos la reparación. Eso de sólo llevarles una despensita denota falta de imaginación de la gobernanta y ausencia total de empatía para con los damnificados, pero bien que le sirve para la foto que presume en sus redes sociales. Vergüenza debería darle atender de esa forma tan mediocre a la gente que de verdad necesita ayuda”, lamentó.
“Son las mismas que entregó hace dos meses la Momia Guanajuatense en mi colonia, respondió de inmediato doña Chela, se ve que es el mismo proveedor que les arma las miserables despensitas con un rollo de papel higiénico, una bolsa de frijol con gorgojo, otra de medio kilo de azúcar, un aceite de medio litro y una lata de atún. Con ese bastimento cree la viejita loca que la gente se va alimentar un mes”, preguntó.
—“Tremendo negocio ese de las despensas —intervino otra vez don Memín— este nefasto, pésimo y corrupto Gobierno de “Todos los rateros”, tiene despensitis aguda, y cree que todos los problemas sociales se resuelven regalando despensas, que no han de costar ni 100 pesos, pero que ellos, los gobernantes los cobran como de a mil pesos por pieza. Negocio redondo para alguno de los parientes de la senecta paseadora”, sentenció.
—“Hay numerosos barcos y lanchas que se hundieron a lo largo de nuestras
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