No se cumplirá la promesa de la modernización del transporte urbano mediante la llegada de las unidades “Co’ox” y mucho menos con la entrada de servicio de taxis por plataformas digitales…
Con cuentos chinos no salió el secretario de Gobierno, Armando Constantino Toledo Jamit, para justificar que el proyecto de modernización del transporte urbano de la ciudad capital no se concretará este año, como pomposamente anunció el 1 de agosto la mentirosa gobernadora Layda Elena Sansores San Román.
La promesa laydista durante su “Tercer Informe” aseguró que para octubre de este año llegarían las 22 primeras unidades de la empresa Co’ox, para empezar a prestar servicio inmediatamente. Ya concluyó ese mes y hace unos días nos salió el florero del cuarto piso a decirnos que siempre no, que será hasta el 1 de enero cuando empiezan a circular las nuevas unidades.
¿El pretexto? Uno: que los fabricantes chinos no cumplieron con su compromiso, algo que por cierto, no parece tener mucho de verdad, y esperemos que en su momento, los empresarios orientales le respondan de manera contundente a este Gobierno de mentiras y de promesas incumplidas.
Dos: que los camiones nuevos sí van a llegar este año —según el florero Toledo sería este mismo mes—. pero que “se tienen que configurar para el nuevo sistema de cobro que va a ser por tarjeta”. Imagínese, amable lector (a) que para configurar 22 camiones se llevarán casi dos meses. En ese contexto, cuando lleguen las demás unidades, 200 según lo prometido, lo más seguro es que operen cuando haya terminado este nefasto, corrupto y fallido Gobierno.
Este asunto, junto con el tema de la modernización de las carreteras, y las “utopías” que anunció la senecta mandataria en su evento del 1 de agosto, nos confirman que no tenía nada que informar, por lo que al igual que Alito cuando presentó sus proyectos fantasiosos, se tuvo que colgar de promesas a futuro para tener algo que decir. Para cosechar aplausos, pues.
Lo cierto es que el tema del transporte público en Campeche sigue en condiciones deplorables. No se cumplió la promesa de permitir la entrada del servicio de taxis a través de plataformas digitales, y la atención que prestan los del FUTV sigue siendo tan pésima como sus unidades y el maltrato de sus choferes.
No hay un rubro en que esta fallida Administración Sansorista pueda presumir que hay avances. Los datos del Inegi muestran de manera contundente que la economía está en condiciones calamitosas, y eso no se arregla con los cuadros estadísticos truqueados que muestra la farsante gobernadora en sus “Martes de la Rata”.
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