Lamenta obispo el aumento de inseguridad

El obispo de la Diócesis de Campeche, José Francisco González González, lamentó el incremento de la inseguridad en la entidad, tras revelar que el sacerdote José Guadalupe Collí Uc ya fue dado de alta del hospital, e interpondrá denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por el robo de pertenencias personales y de la iglesia.

Por fortuna —agregó—, el padre ya está bien, el hospital le dio de alta y ya se recupera, y una vez que ponga la denuncia, porque también le robaron su carro y otras cosas personales, además de algunas de la parroquia, le toca a la FGE investigar, y a ver si encuentra algún indició que pueda dar curso a esta situación.

Criticó el incremento del ambiente de inseguridad en el Estado, pues se ve en las familias de la Diócesis que aumentan los robos, las extorsiones y los asesinatos, agradeció que no hubo nada tan grave que lamentar, pues no hubo un sacrilegio al Sagrario, y aclaró que al sacerdote no lo golpearon, sino que lo sedaron para dejarlo dormido.

“Lo sedaron para llevarse sus cosas, incluso las ofrendas para la celebración de la misa, como vino y ostias. Se han tenido robos en los Municipios de Carmen, Escárcega y Campeche, pero que hayan tocado físicamente al sacerdote no había pasado y es la primera vez que nos toca”.
De las religiosas que piden dinero en los Municipios, el obispo mencionó que se hizo denuncia pública, pero no ante la FGE, porque son monjas al parecer no católicas, sino que pertenecen a una secta que se formó en Michoacán llamada “La Nueva Jerusalén”, fundada por el que se hacía llamar “Papá Nabor”, que ya falleció.

“Por la forma de actuar, pareciera que no son monjas de ahí, yo pienso que están utilizando un hábito que no les corresponde para obtener un recurso, o algún bien material”, remató.