MARCELA SE EXHIBE ENTRE EL CINISMO Y LA FRIVOLIDAD

Mientras los hechos delictivos donde salen a relucir armas de fuego y los robos se tornan cada vez más continuos o cotidianos, la jefa policiaca Marcela Muñoz Martínez se preocupa por realizar labores ajenas a su encomienda, en lugar de ponerse a trabajar en la aplicación de estrategias para combatir la inseguridad. Van dos ejemplos.

La guanajuatense consentida de la gobernadora Layda Sansores, se da tiempo para publicar en sus redes sociales que visitó en un albergue y le llevó regalitos a Joel, mejor conocido como “Choco”, el niño que estuvo extraviado varios días en Palizada. ¿Y las estrategias para contrarrestar el incontenible y preocupante avance de la delincuencia?, ¿acaso ya cumple funciones que corresponden al DIF?

Como si lo anterior no fuera suficiente, también publicó la foto de una prenda y escribió: “¿A poco no está divino este hermoso tocado de azahares, elaborado por el talentoso diseñador Gerardo Borges? Es una auténtica joya que no quiero ni sacar de su caja…. Está elaborado con perlas y cristal checoslovaco. Me encantó porque refleja el estilo y elegancia que caracteriza a la mujer campechana. ¡¡Se los presumo!!”.

¿Y la vigilancia para cuándo?