Miles vieron el eclipse solar

Miles de carmelitas observaron el eclipse anular del sol en varios puntos de la ciudad, un fenómeno que se registra cada 48 años en Ciudad del Carmen.
Mediante lentes especiales, instrumentos caseros y filtros de soldador, personas de todas las edades disfrutaron de este evento.
Desde las nueve de la mañana, familias completas se reunieron en puntos clave para observar el fenómeno.

Este es el caso del parque del pescador ubicado en la colonia Puntilla, a donde se concentraron con el temor que los nublados anunciados irrumpieran el momento proyectado para el máximo de la conjunción entre el sol y la luna, que fue a las 11:24 de la mañana.
Un eclipse solar ocurre cuando la luna pasa entre la tierra y el sol, total o parcialmente ocultando la imagen del sol para un espectador en la tierra.

En esta ocasión se observó en un porcentaje bastante alto y aunque no fue posible ver el 100 por ciento como sucedió en Tenabo, la experiencia de la población fue muy positiva.
Debido a que las recomendaciones eran de no mirar de manera fija el sol, sin protección, para ello se recomendaron usar lentes especiales, evitando así daños a la retina.
Muchas personas llevaron las gafas y otros al llegar al sitio les hicieron entrega a manera de préstamo, así como instrumentos que evitaran que miraran hacia el sol.

Varios fueron más habilidosos y crearon las conocidas cajas especiales, así como como caretas, estas últimas las realizaron con platos desechables de unicel, hicieron un rectángulo y por dentro colocaron un cristal de soldador de espesor 14.

También hubo quien hiciera negocio, pues esos vidrios especiales que se usaban para adaptar a teléfonos celulares o cámaras fotográficas los vendieron en 50 pesos cada uno.
La experiencia fue inigualable, para los más pequeños porque nunca habían visto tal espectáculo natural.
Para los más adultos no tanto porque tal vez es uno más de los eclipses solares que tuvieron la oportunidad de disfrutar.

Este fenómeno se puede presentar cada ocho años, 11 días con ocho horas, en diferentes regiones del país o todo el mundo.
Solo en Ciudad del Carmen se tiene que esperar 48 años para volverlo a ver.