Virus de negligencia

Si esa nueva epidemia crece a los niveles de pandemia, seguramente habrá más víctimas, ya que este Gobierno ineficiente no sólo no toma previsiones, sino que tampoco se ha preocupado por este asunto…

Mientras que a nivel central la Secretaría de Salud ubica a nuestra entidad en el sitio 11 en cuanto a casos registrados de metapneumovirus, que según algunos expertos es la nueva pandemia que podría afectar gravemente a la población más vulnerable, principalmente niños y ancianos, ni a la Tía Rata ni a ninguno de sus brillantes asesores se les ha prendido el foco para poner en marcha medidas preventivas de urgencia, alertó asustado don Memín.

—“Es notable la diferencia entre un Gobierno bien planeado, organizado y eficiente, como el que atendió los tiempos de la pandemia en nuestra entidad, recordó don Julián, a uno que sólo se deja llevar por inercias y por sus ocurrencias. Ninguna autoridad oficial ha salido a dar un informe claro y preciso sobre esa nueva enfermedad, y tampoco se han tomado medidas para evitar la proliferación del virus”, observó.

—“Con eso de que se ha expandido el virus de la negligencia, de la ineptitud, de la corrupción, de la incapacidad y de la perversidad entre otros males —apuntó por su parte el poeta Casimiro— qué más les importa que también se difunda el virus del metapneumovirus y si las consecuencias de esa negligencia son fatales, ellos se encargarán de buscar culpables, que para eso sí son buenos”, aseveró.

—“Lo que no sabe la viejita decrépita, señaló por su parte doña Chela, es que ya los habitantes del reino de la Culebra y la Garrapata hemos dado muestras de cultura sanitaria, de responsabilidad ante esas amenazas y de mucho autocuidado. Si sobrevivimos a una pandemia que diezmó a una buena parte de la población mundial, quiere decir que sabremos enfrentar con éxito otros retos”.

—“Eso que dices —reclamó airado don Memín— lo único que alienta es más irresponsabilidad gubernamental. Ellos tienen también que hacer su trabajo, no se vale que se sigan haciendo tarugos y gastándose el presupuesto en sus lujos y derroches cuando en los hospitales no hay ni algodón ni alcohol para curar heridas y no se diga de médicos o especialistas. Si esa nueva epidemia crece a los niveles de pandemia, seguramente habrá más víctimas, ya que este Gobierno ineficiente no sólo no toma previsiones, sino que tampoco se ha preocupado por mejorar la situación de los hospitales públicos y centros de salud”.

—“Ojalá no quieran intervenir cuando ya el niño esté ahogado en el pozo, aconsejó don Julián, no olviden que el año pasado una buena cantidad de niños fallecieron a consecuencia del dengue hemorrágico, ya que en los hospitales no había ni capacidad ni equipos para atenderlos y literalmente sólo sobrevivieron los más fuertes de los que fueron ingresados, así que atendiendo a la recomendación de doña Chela, yo también sugiero que adoptemos las medidas preventivas que ya conocemos y que nos cuidemos hasta el extremo, ya que este Gobierno es un auténtico bueno para nada”, remató.