Repudia Layda la feria carmelita

La carmelofobia de la gobernadora Layda Sansores San Román quedó de nuevo en evidencia al no llegar a ningún evento inaugural de la feria anual, y lo hizo en repudio y represalia por las quejas contra su corcholata favorita Claudia Sheinbaum Pardo en su visita a la Isla, derivado de su mal Gobierno y el abandono en que tiene al Municipio.

Así lo expresó el secretario regional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Luis García Hernández, quien expuso que una vez la mandataria estatal violenta la ley, al no solicitar permiso al Congreso del Estado para ausentarse del país, y de paso desprecia a los carmelitas, quienes celebran la fiesta más importante del sureste mexicano.

“Es una carmelofóbica que sin pudor muestra su desprecio y repudio a un Municipio que la apoyó y le dio confianza, pero al que hoy le da la espalda, pues no hay obra pública estatal, ni nuevas inversiones para impulsar el desarrollo en la Isla”.

Además de la grosería de no venir a Carmen ni enviar a algún representante, ella es la culpable de que en Carmen no se hayan instalado las oficinas centrales de Pemex por pedirle al presidente Andrés Manuel López Obrador que no cumpla su promesa, “porque la Isla está saturada”.

La señora se olvida a su conveniencia, que la Feria del Carmen es la celebración más importante para sus habitantes, y a la que todos los gobernadores tratan de asistir, empezando por la entrega de la Medalla al Mérito Ciudadano.

Además, otros eventos como la coronación de la reina y la inauguración de las exposiciones ganadera y comercial, habían sido motivo de visitas de mandatarios estatales, pero Layda Sansores prefiere vacacionar en Guatemala con su pareja, reprobó.

“La negativa de la gobernadora es una reacción de represalia hacia el pueblo carmelita, por los reproches y quejas que recibió su corcholata Claudia Sheinbaum, a quien le reiteraron la falta de agua y de obra pública en la Isla”.

Layda olvida que en una ocasión, cuando ni siquiera estaba invitada a la Feria Carmen, llegó con un sequito de personas y lanzó heces fecales al gobernador Jorge Salomón, pero ahora al frente del Poder Ejecutivo se hace del rogar y no vino, explicó.