La carretera federal 261 que conecta Bolonchén de Rejón con Hopelchén sigue siendo un riesgo latente para los conductores debido a su deteriorado estado. Ariel Domínguez, ejidatario de Bolonchén, denunció el grave abandono de esta importante vía, agravado por las lluvias que han hecho crecer los baches, y señaló que incluso las hierbas ya invaden parte de la carretera. Domínguez exige la intervención urgente de la gobernadora Layda Sansores.
El ejidatario criticó la marcada diferencia entre las carreteras de Yucatán y Campeche, señalando que, al cruzar el arco fronterizo entre ambos estados, es evidente el mejor mantenimiento en Yucatán. “Es inaceptable que, a pesar de la riqueza petrolera de Campeche, nuestras carreteras estén olvidadas”, añadió, destacando que la vía hacia Bolonchén es vital para la región de los Chenes.
Domínguez también expresó que por más de 80 años no habían tenido este problema hasta ahora: “Es una tristeza que, desde que tenemos uso de razón, más de 70 u 80 años, hemos visto esa carretera, y ahorita, pues, está abandonada”. Además, exigió: “Le pediremos a la gobernadora por qué no nos atiende. No podemos seguir esperando mientras el peligro en la carretera crece cada día”. Los habitantes de Bolonchén exigen una respuesta inmediata antes de que ocurra una tragedia.
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