Mientras la gobernadora Layda Sansores San Román y la secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana, la guanajuatense Marcela Muñoz Martínez, insisten en presumir que Campeche es lugar seguro, los robos continúan.
En esta ocasión no fue un comercio, sino una escuela: el Centro de Atención Múltiple (CAM) número 4, ubicado en la avenida Concordia, entre Nopal y Pitahaya de la Ampliación Esperanza.
Al abrir, los intendentes se percataron que amigos de lo ajeno habían forzado una ventana de la cocina para entrar.
Se llevaron, entre otras cosas, un ventilador de pie, una sandwichera y una bolsa de comida.
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