Somos el ojo negro del Estado, recriminan
Habitantes de la Península de Atasta patentizaron su inconformidad por las pésimas condiciones de las carreteras, pues aunque es un problema añejo, el cambio de Gobierno no representó solución a esta necesidad urgente para ellos y usuarios.
Lucy Bonilla afirmó que a la gobernadora Layda Sansores “le vale un reverendo cacachuate las malas condiciones de las carreteras, en especial del tramo Atasta-Nuevo Progreso, que han causado muchos accidentes en esta zona, pero como somos un pueblo no nos quiere atender”.
Todos los Gobiernos han sido lo mismo, y el único que mostró interés en estas vías de comunicación fue el que las construyó hace muchísimos años.
Por su lado, Querubín Izquierdo Hidalgo, habitante de San Antonio Cárdenas, enfatizó: “El ojo negro del Estado está en Atasta, y no es posible que haya el discurso en el Gobierno de que todo está bien y que lo bueno se repite, cuando las condiciones de las carreteras son pésimas”.
El paso inusual de tráileres de todo tipo genera caos y sigue deteriorando el asfalto, en perjuicio principalmente de los habitantes de la zona que usamos el transporte de combis u otros propios, a cada rato se les ponchan las llantas o registran averías.
El tramo Atasta-Campechito desde Zacatal está en pésimas condiciones, resumió.
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