Cayó en 20 por ciento captura de camarón en Tampico: Hernández

Sólo quedan tres barcos, y cada uno trajo entre siete y ocho toneladas .

En un 20 por ciento cayó la captura de camarón, lo que hace poco rentable la actividad, reportaron los dueños de las tres embarcaciones que quedan de la flota al arribar procedentes de Tampico, Tamaulipas.

Dio a conocer lo anterior Adolfo Hernández Maldonado, presidente del Federación de Sociedades Cooperativas de la Industria Pesquera de Altura de Ciudad del Carmen, y reveló que cada embarcación trajo entre siete y ocho toneladas de crustáceo.

Aunque este año el Gobierno ofreció apoyo en diésel marino, por los gastos de operación, en comparación con la captura obtenida, la actividad resulta poco rentable para quienes tenían esperanza de mejorar ingresos para sus familias y las de sus colaboradores.

Tras salir en octubre pasado —expuso Hernández Maldonado—, regresaron a la Isla las embarcaciones Careyes, Gilda I y Gilda III, y aunque se esperaba que la captura fuera mejor en comparación con otros años, pues para eso determinaron los cinco meses de veda, el panorama fue distinto con los reportes de entre siete y ocho toneladas de camarón.

En los años de buena pesca, los barcos camaroneros carmelitas traían desde el Golfo de México hasta 12 toneladas cada uno, con lo cual valía la pena la millonaria inversión, el problema de ahora es que ni con el apoyo ofrecido por el Instituto de Pesca y Acuacultura del Estado de Campeche (Inpesca), trajeron lo suficiente para recuperar lo invertido.

Cada barco requiere más de un millón 200 mil pesos para avituallarse y salir a la mar, cifra muy elevada que en ocasiones el empresario no puede costear, y por eso la mayoría de los armadores de Carmen decidió vender sus barcos a empresarios de Veracruz y Tampico, donde aún existe flota pesquera.

“Por ejemplo, si un barco ingresa con siete toneladas de camarón, cuyo kilogramo lo pagan a 180 pesos, apenas se obtiene un millón 260 mil pesos, y si el barco es avituallado con la cantidad anteriormente señalada, al empresario no le queda nada, pues debemos pagar a los embarcados y a las personas que se dedican al pelado y desvenado del camarón”.

Al preguntarle sobre la posibilidad de una nueva oportunidad de dar otro viaje a Tampico, Tamaulipas, el presidente de la Federación de Pescadores de Altura comentó que si de nuevo reciben apoyo en diésel marino habría la oportunidad, pero quedará a la decisión de cada empresario, porque ante el descenso del volumen de captura y el precio “castigado” del producto, tal vez no les resulte.