“Los más de 200 trabajadores despedidos por la actual administración municipal atraviesan problemas, pues de esa cantidad sólo a 18 les ofrecieron pago que no corresponde por ley a la liquidación”, acusó el síndico administrativo Leopoldo Andrés Hernández Lezama, y calificó como insensible al alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus.
Tras la muerte del exempleado Julio Loría, por lo cual la también trabajadora despedida Celeste Palacios Pérez denunció en redes sociales que su excompañero cayó en depresión ante la falta trabajo y recursos, el síndico administrativo reconoció que en diciembre se recrudeció el problema, con la emisión de algunos cheques cuyas cantidades no correspondieron a lo que marca la ley.
“No sé las causas de la muerte, pero el tema es que traía depresión y preocupación por su liquidación, y tal como alertó Celeste Palacios, que es una de las 200 personas despedidas, ella y los demás podrían tomar una decisión equivocada o enfermar a causa de la desesperación y estrés”.
Aunque los integrantes del Cabildo monitorean esta situación, pues los extrabajadores pidieron ayuda para gestionar sus pagos, poco han podido hacer, porque la única respuesta de los encargados de ese tema es que no hay recursos.
“En diciembre, 18 personas estaban en la lista de finiquito, pero el pago fue de 18 mil pesos cuando la cifra debía ser de 94 mil, es decir, salieron cheques a nombre de despedidos sin el monto correspondiente conforme a la ley”.
“Estamos en desacuerdo, porque cuando una institución ya no requiere el servicio de un colaborador, quiere decir que lo liquidará, y el Ayuntamiento lo que hace es pagar finiquitos indebidamente”, reiteró.
Hernández Lezama comentó que aun cuando los sindicatos velan por los intereses de sus colaboradores, la situación se complica debido a que muchos ya no quieren esperar y han conseguido empleo para cubrir sus necesidades.
A diario pocos preguntan sobre el pago correspondiente, por eso urge que el Ayuntamiento, es decir, el alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus, deje de ser insensible y resuelva la situación laboral, para no seguir dañando a esas 200 familias que perdieron su trabajo con el cambio de administración municipal.
No podría decir que es tema de recursos, pues también depende de la sensibilidad de Gutiérrez Lazarus, pues si decidió correr a cientos de empleados, debió prever el recurso para liquidarlos, pero no fue así, lamentó.
El conducto legal es presentar demanda ante las instancias laborales, sin embargo, quienes controlan ese aparato jurídico es el Gobierno en turno, entonces no hay mucho por hacer cuando todo opera contra los desempleados, sintetizó.
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