Posponen audiencia de sicarios
Hasta finales de mayo fue reprogramada la audiencia de procedimiento abreviado, en la que G.A.M.Ch. y S.G.M. pretenden declararse culpables del asesinato de J.A.M.M., abatido a balazos en febrero de 2019.
Dejando de lado la procuración de justicia en la que se busque la máxima pena a los presuntos sicarios, el titular de la Fiscalía General del Estado de Campeche (Fgecam) aprobó la solicitud para que el Ministerio Público, los familiares de la víctima, acusados y defensa, acuerden la declaratoria de culpabilidad y la reducción de la condena.
En caso de concretarse, será el Ministerio Público quien propondrá la pena, así como el monto de la reparación del daño.
De acuerdo con lo integrado en la carpeta judicial 300/18-2019, la audiencia fue programada para el 21 de abril, pero al no acudir el abogado y justificar su ausencia, el juez de Control la pospuso para el 29 de mayo.
Ambos enfrentan cargos por homicidio calificado. Fueron capturados el 23 de junio de 2019, por los policías de Mérida, Yucatán, por falta administrativa y quienes corroboraron que tenían órdenes de aprehensión vigentes.
Tras ser trasladados a Campeche, el Ministerio Público los puso a disposición del juzgador que los requirió.
Desde el reclusorio de San Francisco Kobén estarán enfrentando el proceso judicial en su contra; la autoridad fijó un plazo de tres meses para la integración de la investigación complementaria.
El homicidio fue perpetrado cerca de las 21:35 horas, el 10 de febrero de 2019, cuando J.A.M.M. conducía su Jeep, blanca, con placas L68-AVE de la Ciudad de México, acompañado de su pareja sentimental, en la calle Narciso Mendoza del poblado de Miguel Hidalgo y Costilla, de Candelaria.
A la altura del paso peatonal, el conductor de la Tacoma le cerró el paso, mientras que el copiloto disparó en varias ocasiones contra la víctima.
Más historias
MOTOCICLISTA DERRAPA Y PIERDE LA VIDA EN LA AUTOPISTA CAMPECHE-CHAMPOTÓN
PERSONA PIERDE LA VIDA TRAS CAÍDA EN SU DOMICILIO
CAMIONETA DA VOLTERETA TRAS ESTALLARLE UNA LLANTA Y SUS OCUPANTES HUYEN