Gradas vacías en II Paseo de Bando

Con una mayor participación ciudadana que en la víspera, pero sin alcanzar las metas esperadas, reflejado en palcos y gradas vacías, así como amplios sectores de los más de cuatro kilómetros del derrotero sin personas, así como una notoria desorganización, se llevó a cabo el Segundo Paseo de Bando General del Carnaval Carmen 2022.

De nueva cuenta, el inicio del derrotero, programado para las 17:00 horas, se retrasó de más de 40 minutos, pese al pronunciamiento del alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus, de ser puntuales, tal vez a la espera que los espacios vacíos, fueran llenados por las personas que poco a poco arribaban.

El derrotero inició en las inmediaciones de la glorieta del Galeón, donde se dieron cita las pocas comparsas participantes, los integrantes de los carros alegóricos oficiales y las batucadas de la ciudad.

Manteniendo los 11 filtros de acceso, en los que estuvieron el personal de la Coordinación de Bienestar Social y de la Comisión para la Protección contra el Riesgo Sanitario de Campeche (Copriscam), realizaron tomas de temperatura y aplicaban gel antibacterial, así como elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP).

Durante el recorrido, los reyes del Carnaval, Jahn I y Aylin I, acompañados de sus respectivas comparsas, trataron de elevar el ambiente, sin embargo, sólo por algunos espacios del derrotero, hubo respuesta por parte de los asistentes.

También formaron parte en este recorrido, los reyes infantiles, Emilio I y Ximena I; los reyes del DIF Carmen, Llergo’s I y Kenny Lú I; la reina del Comdis, Kenny I; los reyes estudiantiles, Ángel I y “Carol I”; los reyes gay, Luis Flores I y Kika Lizz I; así como los reyes del SUTBAJC, Luna I y Paola I.

Dentro de los personajes que más llamaron la atención de los asistentes se encontraron “La vecindad del Chavo”, la Batucada Do Guanal, los estudiantes del Cetmar, la Batucada Mijangos, entre otros.

Pese a la gran cantidad de elementos de Seguridad Pública que se desplegaron en la zona, no faltaron los incidentes provocados por personas ebrias, quienes alteraron el orden público, por lo que hubo la necesidad de ser llamados al orden.