Discriminan al primer matrimonio igualitario

PROGRESO (El Universal).— Pese a que reservaron el llamado “Pabellón del Amor” a la orilla de la playa de este puerto, el primer matrimonio igualitario en Yucatán no pudo contraer nupcias en ese lugar por cuestiones discriminatorias, según denunciaron, por lo que finalmente se casaron en un improvisado local.

Se trata de Irving y Luciano, quienes el martes pasado por la noche se convirtieron en el primer matrimonio legal en Yucatán entre parejas del mismo sexo. Apenas el pasado 4 de marzo, el Diario Oficial del Gobierno del Estado publicó las reformas reglamentarias que permiten esa unión igualitaria.

De acuerdo con Irving Suárez y Luciano Martínez, quienes desde hace 19 años son pareja, habían solicitado el espacio al Ayuntamiento de Progreso y se les concedió, incluso horas antes del enlace se estaba adornando el sitio que está a la orilla de la playa.

Sin embargo de última hora les avisaron que no sería posible que se casaran en ese sitio que es público por tratarse de una pareja del mismo sexo. Se entrevistaron con el alcalde, el panista Julián Zacarias Curi, quien les aseguró que ignoraba que alguien del Ayuntamiento de Progreso les canceló ese espacio.

La pareja no recurrió al amparo para obligar al Registro Civil a que les permitiera casarse, sino que decidieron esperar que fuera una realidad el matrimonio igualitario en Yucatán y fue cuando el martes pasado contrajeron nupcias.

Ambos comentaron que a lo largo de su relación han sufrido ofensas y hasta amenazas de muerte, y también actitudes discriminatorias.

Pese a ello, se dijeron convencidos de su relación y su lucha para que la sociedad entienda y acepte que “amor es amor” y que no hay nada de pecaminoso ni arbitrario el que dos personas se profesen amor.

Señalaron que pese a todo, la lucha por los derechos de la comunidad LGBT tiene que continuar y no hay que callar los abusos o excesos que se cometan con la gente que tiene esas preferencias.