Mónica Fernández “es una bandida”, acusa Hernández

Al llamar a su homóloga de Movimiento Ciudadano (MOCI), Mónica Fernández Montúfar, “una bandida, ya que como presidenta del DIF Municipal adquirió el crédito de 860 mil pesos para la remodelación de una casa de su hermano Eliseo”, la diputada local morenista, Elisa María Hernández Romero, aseguró que también el legislador naranja, Paul Alfredo Arce Ontiveros, debe preocuparse por su situación, ya que inició la auditoría del 2021 en la que le tocó estar como alcalde sustituto.

E indicó que Arce Ontiveros, “en lugar de salir a la defensiva y servir como vocero del prófugo Eliseo Fernández Montúfar, debe entregar todas las pruebas y denunciarlo”, porque si tan sólo en la auditoría del ejercicio fiscal 2020 detectaron irregularidades por 50 millones de pesos, en la del 2021, que corresponde a la que encabezó el actual coordinador de la bancada naranja, no se duda que salgan más cosas, pues fue en plena campaña a la gubernatura cuando se habrían dado más irregularidades.

La legisladora morenista recordó cuando Mónica Fernández subió a la tribuna del Congreso Estatal, en una sesión ordinaria, para llamar a los diputados de Morena “corruptos”, sin embargo, ante la suciedad que ha salido a flote en la administración de su hermano Eliseo, en la que ella está directamente involucrada, “si hablamos de bandidos, pues ahí está ella”.

Y añadió que de acuerdo con la Auditoría Superior del Estado (Asecam), en la denuncia que se interpone, “ella (Mónica Fernández), como presidenta del DIF Municipal, contrató un crédito de 860 mil pesos a nombre de la dependencia en el 2019, con el que remodeló una casa de su hermano ubicada en la calle 10, número 12, frente al Instituto Campechano (IC), y donde ahora se encuentran unas farmacias de bajo costo. Ese inmueble, además, fue clausurado por el INAH en su momento, y aún así siguieron trabajando en él, valiéndoles gorro”.

Por último, Hernández Romero retó a Mónica Fernández a que si tuviera un poco de dignidad y vergüenza, denuncie a su hermano, porque no sólo fueron 860 mil pesos, el caso implica 50 millones, y las investigaciones continúan, y en las que pueden aparece más irregularidades.