Someten a Renato y acude a dialogar

Luego de 36 horas consecutivas de bloqueo, la carretera federal 180 “Costera del Golfo” fue reabierta a la circulación, pero el fiscal general Renato Sales Heredia se vio obligado a viajar de Campeche a la Península de Atasta, para reunirse con los manifestantes en Puerto Rico.

Aunque durante la conferencia virtual de los martes de la gobernadora Layda Sansores, el funcionario acordó dialogar de inmediato con los manifestantes, quienes exigían su presencia, ayer decidió acercarse.

Así, muy temprano y mediante raid en una motocicleta sin usar casco protector, llegó y dialogó con familiares de José Ángel Tacú de la Cruz, el joven que habría sido asesinado, y de Jorge Reynoso Gutiérrez, el trailero desaparecido desde noviembre pasado en la bajada del Puente Zacatal.

El fiscal también platicó con Isauro López Luna y Amparo García Arjona, abogados de las familias demandantes que desde la noche del lunes cerraron la vía federal, lo que desencadenó el bloqueo maratónico de día y medio y ocasionó millones de pesos en afectaciones.

Sales Heredia prometió que no habrá carpetazo a ambas investigaciones, y no habló de lo que anteriormente rumoró, en el sentido de que el bloqueo estaba orquestado desde la dirigencia nacional del PRI.

Las autoridades puntualizaron que en relación a la desaparición de Reynoso Gutiérrez, es tema abierto bajo investigación.

Acompañado del subsecretario de Gobierno, Daniel Lanz, la vicefiscal Yadira de los Arcos Jiménez y otras autoridades, Sales Heredia prometió que no habrá represalias contra los manifestantes.

Cerca de las 10 de la mañana, los pobladores acordaron levantar el bloqueo.

Aunque no hubo minuta firmada, el fiscal anotó los puntos planteados por las familias inconformes y el grupo de litigantes.

Los traileros atascados mencionaron que aunque la mayoría de sus productos están asegurados, las pérdidas son cuantiosas, pues hay aves de corral, cerdos y alimentos perecederos que necesitan refrigeración.

Por la obstrucción del tráfico vehicular se formó una fila de vehículos de casi 40 kilómetros, desde Atasta hasta las inmediaciones de Nuevo Campechito.