No escucha Pablo a regidores opositores

En 10 meses del Gobierno de Pablo Gutiérrez Lazarus, sólo ha habido sesiones extraordinarias a modo, pues bajo todo tipo de argumentos se evita que la oposición eleve a discusión temas que deben tratarse en el pleno del Cabildo, y asuntos que no puede resolver pretende ignorarlos y evadirlos, lo cual demuestra que como autoridad es incompetente.

Al criticar lo anterior, el décimo primer regidor por Movimiento Ciudadano, Carmen Cruz Hernández Mateo, reveló que en la sesión pasada tuvo que exigir la resolución a la exempleada de Bienestar Social, África Saldaña Alderete, y la reanudación de obras de pavimentación, pero en ninguno caso obtuvo respuesta, pues para la Comuna no son temas de relevancia.

La pasada vigésima sesión extraordinaria —apuntó—, fue una más de las organizadas y direccionadas, para abordar temas de interés del alcalde Pablo Gutiérrez, los cuales distan mucho de problemas que aquejan a los ciudadanos.

“Peleamos desde el inicio de la administración, pues a través de las sesiones ordinarias el regidor tiene oportunidad de expresar lo que la comunidad nos solicita. No sólo es meter oficios, hay temas que se tienen que discutir en el pleno del Cabildo, pero esta administración en lo que va de 10 meses no da oportunidad”.

“Se trata de sesiones extraordinarias, por eso en la pasada aproveché para patentizar mi inconformidad por tener que seguir órdenes del día a modo, debido a que solamente es lo que ellos deciden y quieren tratar”, se quejó.

Hernández Mateo detalló que en la “interrupción” que hizo en la reunión, hizo referencia al caso de la manifestante África Saldaña Alderete, quien desde hace más de mes y medio reclama su reinstalación, pues si bien es cierto que el Ayuntamiento determina si desea o no a esa persona en su plantilla laboral, lo ideal es solucionar el problema.

Le ofrecieron 28 mil pesos por 28 años de labores, lo cual no es justo, y no entiendo por qué no quieren hablar de un tema que nos compete a todos, refirió.

Hernández Mateo agregó que otra inconformidad planteada y sin retroalimentación del alcalde como máxima autoridad, es el tema de la obra pública en colonias, pues sea con recursos propios o de Pemex, la obligación del Ayuntamiento es vigilar que sea ejecutada en tiempo y forma, para evitar sospechas de opacidad y corrupción.