MEAVE, ENTRE POSIBLES AUTORES INTELECTUALES, SEÑALA MARTHA GARCÍA
Las investigaciones que la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción del Estado de Campeche, lleva a cabo por el presunto desfalco de 56 millones de pesos a la Universidad Autónoma del Carmen (Unacar), ahora vincula al grupo cercano a la exdelegada de Programas para el Bienestar, Katia Meave Ferniza, y operador Joshimar Cruz Potenciano, a quienes se menciona como los posibles autores intelectuales.
Martha García Sánchez, vocera de la organización Carmen contra la Corrupción, A. C., destacó que de acuerdo con información vertida, la ahora extesorera Isabel M.C., cayó en las redes que le tendió este grupo y se relacionó con Jorge Antonio B. T., alias “El Güero”, quien supuestamente la convenció de hacer el megafraude, para financiar actividades políticas del grupo cercano a Meave Ferniza.
“Se dice que Cruz Potenciano, identificado como el principal operador de la exdelegada de Programas para el Bienestar, y El Güero, convencieron a la extesorera para participar en el fraude, que serviría para financiar actividades políticas de Morena, y al ganar este partido las elecciones del 2021, el rector José Antonio Ruz Hernández sería destituido”.
La exfuncionaria universitaria —explicó García Sánchez—, confió en esa promesa al percatarse de la influencia de Cruz Potenciano en el grupo morenista, y sin dudarlo aceptó ser parte del saqueo.
“Tras el proceso electoral, el grupo político de Meave Ferniza quedó visto como traidor y de operar contra la campaña de la hoy gobernadora Layda Sansores San Román, por lo cual fue enviada al Estado de Jalisco, al igual que su delfín Cruz Potenciano”.
“El saqueo a las arcas de la Casa de Estudios fue perpetrado por tres exfuncionarios de la Unacar encabezados por la extesorera Isabel y 13 personas más, quienes durante los años 2020, 2021 y 2022, presuntamente transfirieron a diversas cuentas más de 56 millones de pesos”, puntualizó.
Hoy la extesorera enfrenta denuncia penal por los delitos de ejercicio indebido del servicio público, abuso de autoridad y uso indebido de atribuciones y facultades, entre otros que pudieran configurarse.
Estos recursos deben ser devueltos a la institución, y los culpables comparecer ante un juez de Control, pues el caso no puede quedarse en el olvido y menos otorgar el perdón, subrayó García Sánchez.
Pensar que agarraron de ingenua a la extesorera resulta infantil, ya que estamos ante un caso donde las finanzas de la Unacar son puestas en manos de gente profesional, sentenció.
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