DE NUEVO MARCHAN; TAMBIÉN PIDEN LIMPIA EN EL CONSEJO UNIVERSITARIO
Decenas de estudiantes marcharon por diversas calles de la ciudad, para exigir de nuevo la salida del rector José Antonio Ruz Hernández y del Consejo Universitario. En esta ocasión no los acompañaron trabajadores sindicalizados.
Partiendo del Centro Cultural Universitario, alumnos de distintas facultades pidieron respeto a su pliego petitorio, y advirtieron que aunque haya solución al problema con el sindicato, no habrá retorno a clases hasta que renuncie Ruz Hernández.
Encabezados por Melissa Sánchez Medina, Carlos Alberto Granda Molina y Alejandra Berenice López Hernández, integrantes del Consejo Directivo de la Federación Estudiantil Universitaria de Carmen (Feucar), los estudiantes se congregaron en el Centro Cultural Universitario, en pleno Centro de la Isla.
Partieron en sentido contrario a la circulación sobre la calle 28 hasta llegar a la 25, donde dieron vuelta para llegar a la 31 y arribar al Centro de Vinculación Universitaria, donde tomaron la glorieta del Camarón para realizar mitin.
Lanzaron consignas contra el rector Ruz Hernández e integrantes del Consejo Universitario, cuyas renuncias o ceses inmediatos demandaron, aunque el problema con el sindicato tenga arreglo.
Al grito de “Ruz se lo robó y el Consejo lo aprobó”, los estudiantes patentizaron su respaldo a la demanda de los jubilados y pensionados de la máxima Casa de Estudios, quienes se mantienen en paro por el adeudo de tres quincenas atrasadas, y criticaron el abandono en que están sus instalaciones.
Con ayuda de un megáfono, expresaron: “Nunca más estaremos callados, exigimos que se nos permita expresarnos, defender los derechos de nuestros compañeros y demandar las carencias que padecemos”.
Pidieron regreso digno a clases presenciales, con Internet de calidad para mayor desarrollo del proceso enseñanza-aprendizaje, mantenimiento y equipamiento de las instalaciones y mejores herramientas para sus prácticas.
Representantes de alumnos de las diferentes facultades expusieron carencias, siendo el común denominador salones no dignos y falta de mantenimiento y reparación de aires acondicionados.
“No puede haber silla rectoral de oro y pupitres en mal estado”, afirmaron, y consideraron urgente brindar mantenimiento a la embarcación y motor fuera de borda de la institución y al Jardín Botánico.
Algunos alumnos puntualizaron que no les importa que la gobernadora Layda Sansores San Román le entregue dinero al rector, para solucionar el problema con los sindicalizados, porque sus peticiones también tendrán que ser escuchadas.
“El Consejo Universitario tiene que entender que existe la voz de los estudiantes y debe ser escuchada, de lo contrario, no habrá clases presenciales”.
Alumnos de enfermería recalcaron que el rector cometió un error al minimizarlos, pues ahora tiene que dar respuesta al pliego petitorio, pues de no hacerlo le impedirán el ingreso a la Unacar.
La salida más fácil a este conflicto es que renuncie y se convoque a elección con un representante estudiantil, pues de no ser así seguirán las inconformidades públicas, concluyeron.
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