LOS VECINOS DEL FRACCIONAMIENTO MEDITERRÁNEO HABÍAN PEDIDO QUE LO MANDEN A LA CORRECCIONAL DE MENORES
Tras la firma de convenio entre las partes ante el Ministerio Público, el menor de edad —Emmanuel— involucrado en el incendio en una propiedad del Fraccionamiento Mediterráneo fue dejado en libertad.
Lo anterior, pese a la solicitud de los vecinos de que lo enviaran a la correccional de menores, como escarmiento por sus actos.
Ante la poca información de la Vicefiscalía, transcendió que los padres del menor detenido por elementos de seguridad privada del referido lugar y entregado a la Policía Estatal Preventiva (PEP), llegaron a un acuerdo con la persona afectada.
Así, el menor fue dejado en libertad pese a la solicitud de los vecinos del fraccionamiento, de que le apliquen la ley y los protocolos para los menores infractores, para enviarlo a la correccional de Kila, Lerma.
Del otro menor implicado, que logró burlar a los elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP), no se informó mucho, sólo que entre todos lograron el convenio de reparación de daño.
Extraoficialmente, se informó que el otro adolescente que logró huir a bordo del taxi en que llegaron, resultó ser primo del detenido, y las familias estaban dispuestas a reparar los daños.
De las investigaciones y declaración del involucrado sobre qué lo motivó a quemar la residencia, la autoridad se reservó la información, pero varias familias de Mediterráneo insistían en que les apliquen la ley.
En redes sociales exigieron a la Fiscalía aclarar qué motivó a los menores a incendiar la casa, porque alguien que actúa de esa forma puede ser considerado un criminal.
No pensaron en los daños y afectaciones a terceros. Rociaron gasolina sin importarles que diversas casas tienen cámaras de circuito cerrado grabando las 24 horas. Todo lo que hicieron fue registrado segundo a segundo, manifestaron.
De acuerdo con testigos presenciales, cerca de las 21:45 horas del viernes, dos adolescentes —uno de 15 y otro de 16 años—, arribaron en taxi a las afueras de una vivienda en la calle San Antonio del referido fraccionamiento, con una garrafa de combustible, la cual vaciaron, y después lanzaron un encendedor.
Tras la fechoría se mezclaron entre los vecinos, y como si nada hubiera pasado se fueron comiendo golosinas hasta que en video fueron identificados y detenidos por lo de seguridad privada.
El menor dijo llamarse Emmanuel y tener 15 años de edad. En bicicleta intentaron pasar inadvertidos entre los curiosos, pero fueron identificados pero sólo él detenido y entregado a la PEP.
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