HABRÍA SIDO FEMINICIDIO, SUICIDIO U MUERTE NATURAL
El deceso de una joven en la colonia Leovigildo Gómez generó la movilización policiaca y de los ministeriales, además de exagerado y arbitrario acordonamiento sin que se esclareciera la causa de la muerte.
Cerca de las 13:00 horas de ayer, fue encontrado el cadáver de la mujer de entre 18 y 19 años, en el interior de predio de la calle Jerusalén entre Sinaí y Tulipanes.
El papá fue quien dio el reporte al número de emergencia del 911. Al sitio llegaron los socorristas del Sistema de Atención Médica de Urgencias (SAMU) pero los oficiales de la Policía Estatal (PE) no los dejaron pasar. Al parecer la muchacha era familiar de uno de ellos.
La zona fue acordonada por los agentes que tomaron decisiones violentando los derechos de los vecinos.
Los funcionarios de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC) ampliaron el perímetro, incluso delimitaron en dos ocasiones calles más adelante aún cuando se trataba de una “escena cerrada”.
Cerca de una hora después llegaron los integrantes de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y del Instituto de Servicios Periciales para el procesamiento de la escena.
Alrededor de las 15:30 horas, se presentó el personal del Servicio Médico Forense (Semefo) que llevó el cadáver al anfiteatro de la Fiscalía General del Estado de Campeche (Fgecam) y tras los trámites legales lo entregaría a los familiares.
En un principio fue reportado como suicidio —que de ser así sería el número ocho en lo que va del año—, luego que habría sido ahorcada y finalmente que murió por infarto.
La Fgecam no brindó información al respecto ni si aplicaron los protocolos de feminicidio.
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