Zafarrancho en pago de becas Bienestar

ANTE DESORGANIZACIÓN, LA GUARDIA NACIONAL Y LA POLICÍA INTERVIENEN

La desorganización en el pago de la beca “Benito Juárez”, generó zafarrancho ayer por la mañana frente a la sucursal del Banco del Bienestar del Centro, lo que obligó a elementos de la Guardia Nacional y Policía Municipal a intervenir.

La intervención de la fuerza pública para calmar los ánimos, se debió a que padres de familia e hijos bloquearon la calle 37 por 26 y golpearon las puertas de cristal de la sede bancaria.

Alrededor de las 9:00 de la mañana, personal del banco anunció que sólo atenderían a 60 personas, lo que generó molestia en los cientos de padres de familias que se formaron desde la noche del jueves, pues desde hace días han intentado cobrar.

Papás enfadados como Clara Isabel Prado Gallegos y Antonio Rodríguez Morales, recalcaron que las cosas se salieron de control porque la empleada del banco dijo en tono altanero que no todos serían atendidos.

El problema se recrudeció —comentaron—, cuando algunos padres que recién habían llegado, armaron el borlote porque querían ser los primeros en pasar.

Prado Gallegos dijo que aunque el papel de su cita era a las 4 de la tarde, llegó a las 5 de la mañana, porque a conocidos con cita para el jueves no les respetaron horario.

Se anotaron para evitar “colados” en la fila, y al llegar el personal les entregó fichas con la cual respetarían sus lugares, pero después la empleada salió y dijo que sólo atenderían a 60. Brotó el encono.

A decir de Rodríguez Morales, la actitud del personal no fue la adecuada, y aunado a la agresividad de muchos papás se armó el conflicto.

Hubo cierre de la calle y golpes a la cortina metálica que la empleada ya había bajado, por temor a que rompieran los vidrios de la sucursal bancaria o lastimaran a sus compañeros.

Tanto los padres entrevistados como otros formados sobre toda la cuadra de la calle 37 hasta vuelta sobre la 22, lamentaron que en cada programa federal haya mala organización.

“Si hay gran cantidad de beneficiarios y no tienen suficiente capacidad de atención, para qué saturan los días de cita”.

Un elemento de la Guardia Nacional tomó control de la puerta del Banco del Bienestar y, lista en mano con nombre de los beneficiarios, logró que la situación de caos y enojo se tranquilizara, pues anunció que serían atendidos los 294 citados.

Los trabajadores bancarios decidirían si atendían o no a los demás.