Marcharon cientos para exigir justicia

Al grito de “justicia” y “Gobierno opresor”, cientos de feministas de todas las edades marcharon por las calles del Centro Histórico, en conmemoración al Día Internacional de la Mujer, en que fue notoria la ausencia de elementos de seguridad femeninos para cuidar a los contingentes, lo que propició que pese a que algunas unidades del transporte urbano no respetaron a las marchistas y se metieron en las filas, nadie resultó atropellada.

El contingente se reunió a un costado de la capilla de San Juan de Dios. En un primer grupo estuvieron familias de víctimas de violencia y feminicidios, madres y adultas mayores, personas con mascotas y sociedad civil. Partieron rumbo al Circuito Baluartes. Pidieron a los hombres estar lejos y tomar distancia, entre ellos a reporteros.

A la altura del mercado “Pedro Sainz de Baranda” un operador de la empresa Castamay se metió a la marcha sin importarle si atropellaba a las manifestantes, e incluso le tiró el vehículo a un reportero que intentó defenderlas. No había ninguna patrulla o motociclista de Vialidad, pese a que antier les entregaron nuevas unidades, y de que entre los 148 nuevos graduados de la Academia de Policía, el 41 por ciento fueran mujeres.

Empresarios, turistas y sociedad civil se solidarizaron al ver pasar la marcha que blandía como lema “Yo estoy contigo, yo si te creo”, algunos entregaron agua y algunos presentes, e incluso retiraron mesas y sillas para que pasarán con tranquilidad.

Llenas de enojo y clamor, exigieron al fiscal General Renato Sales Heredia que trabaje para proteger a las mujeres, que aceleren las investigaciones de feminicidio, pues muchas no se sienten seguras, además de que son revictimizadas al momento de imponer una denuncia y no dan seguimiento. Como protesta también pintaron algunos locales de la 59 que han tenido casos de violencia, transfobia y presunto acoso sexual, hasta que llegaron al Palacio, donde pintaron ventanas, tiraron agua con colorante rojo simulando sangre, por el incremento de los feminicidios que han colocado a la entidad en cuarto lugar.

En el lugar los policías sólo se limitaron a grabar los rostros de las feministas y pasar un dron sobre ellas para observar lo que hacían, como forma de tener evidencia de quienes hicieron los destrozos, lo que no fue impedimento para que exigieran justicia y dejaran claro que no se sienten protegidas. Luego del breve mitin, los contingentes se disolvieron de manera pacífica.