Repudian campaña de odio de Sansores

TRAS RECURRIR A DEMANDAS POR DAÑO MORAL, AHORA AMENAZA CON DIFUNDIR CARTELES CON SUS FOTOS

La gobernadora Layda Elena Sansores San Román enloqueció, pues la amenaza de difundir carteles con fotografías de políticos y periodistas para señalarlos de misóginos, son signos que ha enfermado de poder y recurre desesperadamente a campañas de odio contra sus críticos y adversarios, señalaron los periodistas Luis Armando Mendoza Leciano y Joel Ynurreta Ynurreta.

En tanto, el periodista y productor de La Barra Noticias, Carlos Martínez Caamal, responsabilizó a la mandataria de cualquier desaparición, atentado o pérdida de vida de cualquier comunicador, mientras que el activista político, Álvaro Omar Chiquini Cu, planteó que los constantes ataques a la prensa y los periodistas que exhiben el latrocinio y denuncian irregularidades, impunidad y abuso de poder, deben parar. El Gobierno de Morena presume ser de izquierda, pero es más fascista, dictatorial y autoritario, donde las libertades se suprimen, los derechos se violentan y las leyes son pisoteadas.

“Dicen que el poder a los inteligentes los marea y a los pend*j*s los vuelve locos, y eso es lo que ha pasado con Layda Sansores. Ya enloqueció”, aseveró Mendoza Leciano, al señalar que la mandataria en su arrogancia e intolerancia muestra signos de haber perdido el piso, tratando de imitar al presidente Andrés Manuel López Obrador con sus locuras y arrebatos.

En un burdo autoritarismo, no tienen respeto por la ley y pisotean la Constitución a su antojo, piensan que lo que dicen está bien, aunque esté mal. Layda Sansores ejerce un Gobierno autoritario, déspota, prepotente, intolerante, que carece de humanismo y vocación de servicio.

Ynurreta Ynurreta condenó la campaña de odio que promueve Sansores San Román en contra de políticos y periodistas, que señalan, critican, denuncian, cuestionan y exhiben las corruptelas de su Gobierno y ejercen responsablemente su derecho de libertad de expresión, mientras que a los medios y comunicadores lambiscones de su Administración, los calla con “dulces”, que no es otra cosa que el llamado “chayo”.

La gobernadora Sansores San Román se erige como juez y parte, tomándose atribuciones que no le corresponden, al acusar a los periodistas y políticos de misóginos, algo que no sorprende porque su Gobierno ha sido de venganzas, revanchismo, represalias y persecución, no sólo contra quienes exhiben y critican su mala administración, sino también hacia familiares y personas cercanas.

Martínez Caamal recordó que los periodistas que exhiben y publican la corrupción e ineptitud del Gobierno de Layda Sansores, son víctimas de demandas por daño moral y objeto de persecución, atropellos y arbitrariedades de la policía, al mando de la guanajuatense Marcela Muñoz Martínez, secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC).

Todo el aparato del Estado, las instituciones y los organismo, así como los recursos públicos son usados por la primera autoridad para perseguir, intimidar, amenazar, amedrentar y tratar de acallar a periodistas y medios de comunicación independientes, que le dan voz al pueblo oprimido y exhiben el saqueo de Layda Sansores, su parentela y secuaces, que tiene como secretarios en las dependencias.

Hay una campaña de odio y desprestigio en contra de los comunicadores que sólo cumplen con su labor de informar, lo que Layda Sansores oculta en sus Martes del Jaguar, y que sus dependencias tratan de maquillar con cifras y datos falsos, por ejemplo la inseguridad. Es una campaña que nunca se había visto que un gobernador emprendiera contra los medios y los periodistas, producto de su ineptitud, odio y rencor contra aquel que no se hinque y no le rinda culto, indicó.

No escucha a la SIP

Aun cuando organismos y organizaciones nacionales e internacionales como la Sociedad interamericana de Prensa (SIP) y Artículo 19 se han pronunciado porque cese la violencia y la persecución en contra de la prensa en Campeche, Layda Sansores no tiene el mínimo interés por aceptar las recomendaciones. Al contrario, arreciará el hostigamiento, e incluso podría comenzar con desapariciones y actos criminales para acallar críticas y denuncias, aseveró Martínez Caamal.

El activista político Álvaro Omar Chiquini Cu sostuvo que la guerra sucia y el odio promovido con todos los recursos económicos y medios públicos por la gobernadora Sansores San Román, es una actitud enfermiza, inmoral y ruin en contra de la prensa, los periodistas y los medios de comunicación independientes, así como de políticos, opositores y adversarios del régimen de la corrupción y el latrocinio de Morena.

Indicó que los tiempos que vive Campeche desde la llegada de Layda Sansores al poder es una tragedia para los campechanos y vergüenza nacional, donde impera el autoritarismo, la corrupción y los nulos resultados, encabezados por la mandataria y secundada por sus funcionarios foráneos, que no tienen compromiso ni convicción para servir al Estado, pero sí saciar sus ambiciones de riqueza.

Con su actitud de odio y revanchismo político, la corrupción y el mal gobierno, descalificando y atacando a opositores y periodistas, lo único que provoca Sansores San Román es el incremento del repudio entre los campechanos hacia su administración de saqueo.
Chiquini Cu exigió detener la campaña de odio y linchamiento contra medios de comunicación y periodistas valientes, que no se doblegan por unos “dulces”, y a los opositores que se mantienen firmes peses a persecuciones y amenazas.

Que investiguen los desvíos en la AO

Las denuncias en contra de la gobernadora Layda Elena Sansores San Román por presuntos actos de corrupción cuando fue alcaldesa de la Álvaro Obregón en la Ciudad de México, debe ser investigadas con objetividad y aplicar todo el peso de la ley a los responsables, exigió el coordinador parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Congreso del Estado, diputado Ricardo Miguel Medina Farfán.

La alcaldesa Lía Limón ha presentado denuncias, por lo que se deben investigar, calificar, esclarecer y deslindar responsabilidades. Más allá de cualquier opinión, lo que la ciudadanía espera es análisis, revisión e investigación con total objetividad, sentenció.

Exigió el esclarecimiento claro y transparente, luego de ser nuevamente señalada por presuntos actos de corrupción por diputadas locales de su propio partido. Las acusaciones de la diputada morenista contra Sansores no es cosa menor. Fue expuesta por sus correligionarios, por lo que se debe garantizar el debido proceso.

Si algo espera la gente es trabajo serio y profesional, no simplemente darle tiempo o desviar la atención. Por la legitimidad de las instituciones, lo importante es aplicar la ley de manera imparcial y objetiva, que derive en responsabilidades y observaciones, subrayó.