Violaron autoridades derechos humanos

Al realizar la noche del jueves operativo sin justificación en el hotel Lossandes, los elementos de la Vicefiscalía Regional y policías estatales y municipales violaron los derechos humanos de huéspedes, acusó Olimpia Álvarez Casanova, presidenta de la Asociación de Hoteles y Moteles.

Exigió a las autoridades un alto a estas acciones, que son arbitrarias al ignorar otra vez el llamado a crear estrategias apegadas a la legalidad, ante lo cual habrá denuncia ante la Comisión de Derechos Humanos, porque lo sucedido lo han hecho en otros hoteles.

La dirigente de los hoteleros remarcó el actuar ilegal y discriminatorio con que actuaron los elementos de las corporaciones, pues ingresaron al hotel, cortaron cartucho, revisaron a los huéspedes y se negaron a informar a los empleados las causas de su “visita”.

“No sabemos bajo la orden de qué autoridad hicieron el operativo, pues sólo dijeron que recibieron llamada de emergencia. Entraron al hotel atropellando los derechos humanos de los que estaban ahí, sin alguna orden, y en aras de buscar a delincuentes violaron todo tipo de protocolos”.

Mencionó que los elementos ordenaron abrir todas las habitaciones para observar a los huéspedes, a quienes exigieron identificarse y pegaron a la pared, mientras quienes comandaron el operativo nunca proporcionaron información, lo que generó pánico.

Los elementos policiacos debieron actuar legalmente o con protocolo inteligente, para evitar atropellos, vulnerar los derechos y garantías individuales de la gente que estaba en el lugar, “pero prefirieron inventar una estrategia para atrapar a un ladrón, sin antes investigar si era cierto ese llamado”.

Aunque se trate de la policía y del delito que sea —apuntó Álvarez Casanova—, hay protocolos y procedimiento legal, por eso aunque es bueno que atiendan reportes o llamados de auxilio, deberían de proceder de forma correcta.

“En vez de pedir información de la bitácora de los huéspedes, incluso imágenes de las cámaras de seguridad o entrevistar al personal de forma sigilosa, pues nunca se les negó el acceso, llegaron presurosos, no respetaron los derechos de la gente y sólo argumentaron que no podían revelar nada, porque según una persona iba a morir, lo que es reprobable”, concluyó.