Siempre hay otros: Los presidenciables

Mariano Espinosa Rafful

La verdad es como un león, no necesita ser defendida. Déjenla libre y se defenderá por sí misma.

San Agustín De Hipona.

No pocas personas en el universo de las redes sociales se dejan llevar por algunas publicaciones, que conllevan pretensiones de forma y de fondo, con argucias insalvables, con palabras a modo, para la degustación en la tertulia informal, la charla coloquial o hasta el comentario al margen de una plática.
Estamos inmersos en una dinámica diferente cada día, con responsabilidades y pensamientos, unos en la vagancia demencial, otros más con objetivos precisos y a corto plazo, y los que nos ocupan hoy en el futurismo político que los salve del desempleo.
Los nombres de los suspirantes los conocemos todos, porque han estado en la escena pública, el servicio en distintas administraciones locales, estatales y federales. Unos haciendo como que hacen, otros en la pose para la fotografía, que por cierto ya no vende como antes para las urnas, último y único objetivo de los políticos de ocasión; y los no tomados en cuenta por el matiz de quien decide.
En un ejercicio inédito recorren el país a como han sido asesorados, Marcelo Ebrard, excanciller, exjefe de Gobierno y herencia de Manuel Camacho Solís, aquel que fraguó, entre otras cosas, el levantamiento zapatista en ese trágico enero de 1994, y autopropuesto para resolver un tema que hasta hoy contiene dudas de su aparición y desaparición como una comisión emergente, sin resultados, la pobreza y la desigualdad persisten.
Famoso el autonombrado Comandante Marcos, y así podemos señalar la construcción de la Línea 12 del Metro en la Administración del camachista, expulsado del país hacia Francia, donde no pocos saben de sus propiedades.
Y es que es inevitable que resurjan estos temas del pasado para todos los que hoy pensamos racionalmente. Aunque se dude, se actúa al margen de la ley de acuerdo a los que sólo observamos, esas normas que deben ser la parte más importante de cada travesía, en la lealtad, la honestidad y el decoro.
La exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, una científica egresada de la UNAM, donde estuvo en el movimiento denominado Consejo Estudiantil Universitario, parece encabezar las encuestas.
Por último, en esta corta baraja de Morena, si tomamos como punto de comparación 1976, cuando terminaba Luis Echeverría y José López Portillo surge como candidato del PRI, único partido para ganar esas elecciones, fueron hasta ocho precandidatos, en el arcaico “sistema” del tapado, pero destapados haciendo su lucha con los diferentes grupos, gobernadores, gabinete y organizaciones de ese partido, está Adán Augusto.
Está creciendo poquito, dirían los que no ven más allá de un parentesco fraternal, paisano, amigo y seguramente con un sinfín de historias por conocerse, fotografías que refrescan la memoria, y reacomodo de fuerzas al interior de la cúpula morenista.
El exsecretario de Gobernación teje fino, no consideramos que le vaya a alcanzar para resultar el postulante, pero se acortarán las distancias, y parte de lo que quede al salir, si sigue la tendencia favorable a Claudia Sheinbaum, el segundo lugar será arropado por el infierno de Dante.