En crisis mayoría de familias por inflación

Requieren 2 mp para comprar despensa semanal

ESCÁRCEGA.— La situación económica de la mayoría de las familias del Municipio está por los suelos, debido a que no hay trabajo permanente.
Quienes dependen de programas de Bienestar no mejoran sus condiciones de vida por el encarecimiento de productos básicos.
María Luisa Méndez, Karla Antonia Martínez y Ana Elizabeth Mejenes, vecinas de las colonias Morelos y Fertimex, coincidieron que para surtir despensa de la semana requieren dos mil pesos.
El principal problema, es que hay pobreza laboral, y tenemos que decir, que ni el Tren Maya lo soluciona, debido a que la mayor parte del dinero que se genera va a parar a otras entidades.
La mayoría de los trabajadores es del centro y norte del país, incluso, son dominados por yucatecos; así, que los empleados sólo gastan lo necesario en la ciudad.
La mayoría de familias consume dos o tres días, ya sea carne de res o de cerdo. La venta de pollo mermó por alza en el precio.
Y para privilegiar la cuestión alimentaria, algunas familias dejaron de gastar en artículos electrónicos y redujeron gastos en vestimenta.
A inicios de año, una familia modesta podía sobrevivir con más de mil pesos a la semana, pero ahora es imposible, menos en estos momentos por el inicio de clases.
La crisis se alagará cuando menos un mes, porque familias pensarán cómo regresar el dinero prestado que utilizaron para los útiles escolares.

Dependen de la importación

Puebla y Yucatán surten verduras, frutas y carnes

ESCÁRCEGA.— Aunque se mantienen los precios de frutas y verduras, la ciudad depende de la importación.
Poblanos acaparan la distribución de frutas y verduras, en tanto, yucatecos ejercen el control en carnes de pollo y puerco.
No obstante, locatarios y abastecedores del mercado “José del Carmen González Salazar” informaron que es probable que por el Día de Muertos y fin de año, encarezcan productos.
Aclararon que ello dependerá de las condiciones que impongan los proveedores.
Por otra parte, Amalia Minelia Narváez, Luisa María Rodríguez y Gabriela Guadalupe Jiménez, amas de casa, manifestaron que las familias no aguantarán más alzas.
El salario apenas alcanza para sobrevivir y cada día resulta complicado atender las necesidades de sus familias.
Desafortunadamente, en el Municipio es mínima la producción, y al importarse la mayoría de los productos, es lógico que aumenten los precios.
Cabe señalar que la poca producción que se comercializa en el centro de abasto se empareja en precios con los otros negocios, lo cual se justifica, ante la oferta y la demanda.
Ante ello, urge que el Gobierno impulse acciones para fortalecer la economía.