Fuera Samantha

Sin resultados positivos por no conocer la situación del municipio

Por dignidad, la directora de Seguridad Pública, Vialidad y Tránsito, Samantha Bravo Muñoz, debe renunciar a su cargo, porque ahora no sólo la cabecera municipal mantiene altos índices delictivos, también se ha extendido a las comunidades rurales, como ocurre en la Península de Atasta.

Consideró lo anterior, Froilán Palestino Cruz, delegado estatal del Frente Estatal de Pueblos Indígenas y Comunidades Marginadas.

“Era de esperarse que Samantha no rindiera resultados positivos en el combate a la delincuencia, ya que no conoce la situación del Municipio de Carmen, Pero si sigue ensimismada en mantenerse como funcionaria, deberá conformar un grupo que analice y ponga en marcha estrategias contra la violencia”, abundó.

Los dos homicidios perpetrados en esta última semana en Nuevo Progreso y San Antonio Cárdenas, dos comunidades de la Península de Atasta, demuestran que la ola delincuencial no tiene límites geográficos.
“No necesariamente tiene que existir poder adquisitivo para que se atribuyan delitos de alto impacto, como los ahí ocurridos”.

Las autoridades municipales sonlas directamente responsables. La directora de la Policía Municipal es la encargada de mantener el estado de paz y debe coordinarse con otros entes para garantizar esa tranquilidad, que desde hace muchos meses se perdió en Campeche.

“No es normal que esto suceda, falta una buena planeación para combatir la delincuencia. Que las autoridades encargadas se avoquen directamente a conformar un equipo que afronte estas situaciones”.
Lo que ahora vivimos pasa cuando ponen a personas que no conocen el Municipio, actúan sin proyectos y programas. La delincuencia aprovecha la falta de responsabilidad de las autoridades encargadas de cuidarnos y nos encontramos con este panorama.

Palestino Cruz se unió a las voces que reclaman al alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus y a la gobernadora Layda Elena Sansores San Román, que tanto a Marcela Muñoz Martínez como su hija Samantha Bravo Muñoz sean retiradas de los encargos encomendados.

Los resultados positivos no han dado y eso no se ven con cifras, sino se vive a diario en las calles y colonias de la Isla, así como en la zona rural.

“Deben renunciar por propia dignidad, no es lo que la ciudadanía espera. Anhelamos que se detenga la ola de violencia que daña a los carmelitas, sean de la cabecera municipal o de las comunidades, donde nunca antes se presentaban estos hechos”, puntualizó.