Especialistas estancan la productividad
El sector ribereño lleva más de una década enfrentando el mal clima para la captura del camarón “siete barbas”, debido a la implementación de restricciones en tiempos inadecuados. Por eso, los especialistas en la actividad pesquera han estancado la productividad, ya que analizan mal el fin de la veda desde sus escritorios.
Así lo denunció Vicencio Luna Pérez, presidente de la Red Social de Pesca y Acuacultura, al indicar que a partir del 1 de octubre se levanta la veda para la captura de dicha especie de crustáceo.
“Sin embargo, no resulta ser de mucha alegría porque en este mismo periodo se enfrentan a malas condiciones meteorológicas, que impiden hacerse a la mar”, abundó.
De acuerdo al líder pesquero, en Carmen existen alrededor de 200 lanchas ribereñas que saldrán en busca del crustáceo, al ser levantada la restricción de cinco meses, impuesta por las autoridades.
“En apariencia tenemos autorización para realizar nuestra actividad productiva, pero es una burla porque las malas condiciones del tiempo nos lo impiden”.
Está mal estipulada la veda. La abren en tiempos de frentes fríos y “nortes”, lo que es perjudicial. Cómo podemos sostener la economía familiar si no es posible realizar nuestro trabajo. No es que no haya producto marino, sino que están mal los estudios del Instituto de Investigación Pesquera, nunca los realizan en el mar, son de escritorio.
“Hago el llamado a las autoridades competentes para que promuevan un verdadero estudio, en el que los especialistas realicen adecuadamente su trabajo, con base a la presencia de producto marino y analizando las condiciones climáticas”.
De lo contrario, el panorama gris del sector pesquero de la región seguirá en la misma situación como hace 10 años.
“Los biólogos están para elevar la producción, no para mantenerla estable y mucho menos para dejarla caer, con este periodo no se ve qué es lo que hacen los científicos del mar, que en lugar de beneficiar nos perjudican”.
Además el apoyo del Gobierno es insuficiente, ante el incremento del costo de productos para la manutención y especialmente la educación de nuestros hijos.
La situación económica del pescador no es buena por la temporada de veda, cambio climático y malos estudios para la actividad.
“Por desgracia, en este contexto se encuentra la mayoría de los siete barberos que habitan las colonias Limonar y Manigua, quienes son más camaroneros que escameros”.
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