Sólo 2 camiones para Lerma; exigen al IET regularizar transporte

Los habitantes de la Comisaría de Lerma se plantaron en las oficinas de la dependencia.

Habitantes de la comunidad de Lerma se manifestaron en oficinas del Instituto Estatal del Transporte (IET), para exigir solución a las deficiencias en la prestación del servicio de transporte urbano que afecta a alrededor de 14 mil personas. El pasado martes plantearon secuestrar un camión y al chofer por no respetar los últimos horarios nocturnos.
Los quejosos llegaron encabezados por el comisario Luis Ángel May Tun y la diputada Karla Toledo Zamora, para dialogar con el titular del IET, Íñigo Yáñez Avilés, y solucionar la carencia de unidades, pues explicaron que solamente dos camiones brindan el servicio y los fines de semana tienen que buscar cómo llegar a la zona centro.
Ruth Dzib Acosta, María del Carmen Morales, la excomisaria Virginia Chablé, Hortensia Zetina, Martín Cab, Trinidad Vázquez, entre otros, dijeron estar dispuestos a pagar incremento de tarifa, pero que se garantice la prestación del servicio.
Expusieron que es el último horario de salida del mercado principal “Pedro Sáinz de Baranda” es a las 8:30 de la noche, por lo que tienen que abordar colectivos e incluso ilegales mototaxis que cobran de 25 a 30 pesos, con el riesgo de padecer accidentes. Un taxi del mercado a Lerma les cuesta 120 pesos.

YA NO SALE PARA COMBUSTIBLE

A su llegada al IET, el concesionario Wilberth Reyes Salas, de la empresa Alianza Moderna de Campeche, fue confrontado.
“En Lerma ya destruimos 100 camiones y hoy la gente prefiere desplazarse en los colectivos a los que dieron entrada, no hay aumento a las tarifas y no sale para pagar el combustible con ocho y cuatro pesos. Si otra empresa quiere entrar, incluso el ADO, adelante, pero la inconformidad tiene trasfondo político”, dijo Reyes Salas.
Aseguró que sus camiones nunca han dejado de prestar el servicio, “pero aquí tienen un conflicto contra el Gobierno (de Layda Sansores) y no nos vamos a exponer, no vamos a arriesgar la seguridad de nadie”, en referencia a la intención de los pobladores de retener y amarrar a uno de sus choferes.
Su comentario le valió el reclamo de los lermeros, que le manifestaron que la queja no es por política, sino porque su empresa no da un servicio adecuado, no cubre la ruta completa y menos cumple los últimos horarios.