En un nuevo episodio de lo que parece ser un constante atropello a los derechos laborales de los policías, la gobernadora ha ordenado despedir a compañeros que se mantienen firmes en sus demandas. A pesar de contar con amparo federal, los agentes están siendo amenazados con la pérdida de sus empleos sin argumentos claros ni justificación aparente.
En una publicación en redes sociales piden que este acto arbitrario y violatorio de derechos sea hecho público, para que la ciudadanía conozca la situación que están enfrentando los policías, quienes solo buscan mejores condiciones laborales, el respeto a sus derechos y la destitución de Marcela Muñoz, quien es la principal responsable del operativo fallido en el Cereso de Kobén.
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