Circula en redes sociales un manual para que los “mapaches” logren su objetivo de comprar votos el próximo domingo, a fin de asegurar el triunfo de los candidatos morenistas.
Si bien es cierto que su autenticidad fue puesta en duda por sus propios promotores, no está de más que antes de ir a votar le eche un vistazo al texto, a fin de evitar caer en manos de esos sinvergüenzas defraudadores.
Para empezar debemos precisar que el documento fue entregado presuntamente a los brigadistas de Morena que el próximo domingo estarán presentes en las aproximadamente mil 230 casillas que se instalarán en toda la geografía estatal.
La finalidad de esos brigadistas de Morena —único partido que acreditó representantes en la totalidad de las casillas— es presionar a los ciudadanos para que opten por los candidatos guindas, “estimular” a los votantes para que sufraguen a su favor y llevar un cómputo preliminar de los resultados, a fin de informar a sus superiores para que se active la ingeniería electoral en los lugares donde sea necesario.
Pues bien, esos brigadistas fueron capacitados recientemente sobre el “Procedimiento para la compra de votos”, que literalmente será de la siguiente forma:
1. La primera persona que entra no vota y mete una hoja doblada en la urna y saca la boleta.
2. La boleta es entregada al coordinador, el cual le entregará su dinero.
3. La boleta es marcada por el coordinador en el recuadro Morena o PT o Verde, dependiendo del coordinador.
4. La boleta marcada es entregada al nuevo votante, quien deberá entrar como si marcara la boleta, pero guardará la que está en blanco y depositará la marcada.
5. Proceder como se indica en el paso 2 y así sucesivamente hasta el final del día.
Es cierto, los “promotores” o “brigadistas” de Morena tendrán que hacer un sondeo previo a fin de identificar a quienes se puedan prestar a estas triquiñuelas.
La instrucción es dar un “adelanto” monetario a los que acepten ser sobornados, a cambio de sus credenciales de elector, los cuales le serán devueltos el próximo domingo, en el “centro de operación” de esos mapaches (mismo sitio donde repartirán tacos, tortas y trancas de cochinita así como refrescos).
Una vez en el centro de operación, el ciudadano recibe su credencial de elector y también la boleta ya marcada, la cual deberá depositar en la urna. El complemento de su pago lo recibirá cuando entregue la boleta en blanco.
La prioridad para los operadores morenistas a nivel nacional es asegurar el triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo, pero en Campeche se dieron otras instrucciones, a fin de operar principalmente en los Municipios de Campeche y Carmen.
Las boletas que serán extraídas de las casillas y entregadas en blanco a los mapaches guindas, son las de la elección a la presidencia municipal. La orden es que ganen Jamile Moguel y Pablo Gutiérrez Lazarus a como dé lugar. Son los candidatos de Layda Elena Sansores San Román.
Los ciudadanos que acepten vender su voto, deberán comprometerse a votar también por los demás candidatos de Morena, especialmente los que correspondan a la elección a Presidente de la República y a diputados locales, pues la orden de la gobernadora Layda Sansores San Román es que por ninguna razón del mundo se pierda la mayoría en el Congreso del Estado. A cambio, esos malos ciudadanos recibirán un apoyo adicional.
El “mapache mayor” que está al frente de estos operativos fraudulentos es el drogadicto sobrino Gerardo “Seso Loco” Sánchez Sansores, quien tiene como lugartenientes a los líderes de las colonias populares y comunidades rurales y a las “búfalas”, a quienes les paga mensualmente por sus “servicios prestados” y les ha garantizado que sus negocios (agencias de cerveza, clandestinos u otros) no serán sancionados mientras se mantengan leales a la causa.
La bolsa dispuesta para comprar la elección es multimillonaria, privilegiando, se insiste, los Municipios de Campeche y Carmen, donde se concentra la mayor parte del padrón electoral, y cuyos resultados parciales incidirán en el recuento total.
Hay otros operativos para sobornar a representantes de los partidos de oposición en las casillas. Otros han “convencido” a los presidentes de las mesas directivas de casilla para que no se presenten el domingo, a fin de que sus lugares sean ocupados por quien esté en la primera fila de la votación, y sean operadores morenistas ya previamente capacitados, quienes tienen la orden fundamental de alterar los resultados en donde la votación le sea desfavorable a Morena.
Es un operativo minuciosamente planeado para defraudar la voluntad popular el próximo domingo. Por eso la instrucción precisa es de que no venda su voto; denuncie a los mapaches que le hagan este tipo de ofrecimientos; vote libremente y vigile que los resultados sean los reales, no los fraudulentos. La del próximo domingo será, sin duda, una larga jornada, que se debe cuidar.
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