En la jornada del próximo domingo no bastará con sólo depositar el voto en la urna. Hay que cuidarlo y denunciar todas las irregularidades de los esbirros de la gobernadora más corrupta que ha tenido nuestra entidad.
Se nota a leguas la desesperación de la cínica y corrupta gobernadora Layda Sansores por controlar los resultados de las elecciones del domingo próximo. Le metió mucho dinero a las campañas de sus candidatos favoritos, y ha dispuesto una bolsa multimillonaria para comprar votos el día de las elecciones.
Hace unas horas se reunió con las familias de los empresarios restauranteros afectados por el incendio de varias palapas en el área de los cocteleros, y dispuso que se pagaran tres meses de sueldo a meseros, cocineros y demás personal que ahí laboraba.
Qué curioso que tomara esa decisión a escasas horas de la jornada electoral, y luego de un mes de que sucedió el desastre. Es un ejemplo más de cómo maneja sus acciones con objetivos partidistas/electoreros, y cómo desvía recursos públicos para tratar de inclinar la balanza el próximo domingo.
Ya hemos escrito antes que la gobernadora Sansores se aprovecha de la falta de autoridad moral de los consejeros del Instituto Electoral del Estado de Campeche para actuar en total impunidad. Ella metió las manos para sacar del escenario a Lirio Guadalupe Suárez Améndola, quien había mostrado mayor grado de independencia e imparcialidad, y colocó en su lugar a un tipo gris, corrupto y entregado, que no ha emitido una sola sanción a los candidatos morenistas que han violado a su antojo las leyes electorales.
Suponemos que también tendrán los ojos cerrados en la jornada de votaciones del próximo domingo, a fin de que los mapaches morenistas puedan actuar a sus anchas. Tampoco dirán nada del conteo amañado de votos que habrá en por lo menos 800 casillas el próximo domingo (en total se instalarán mil 230), donde ya renunciaron los funcionarios de las mesas directivas y se tendrá que “improvisar” con ciudadanos que sean tomados de la fila que acuda temprano a votar. Una estrategia patentada, ciertamente por el PRI, pero que Morena ha perfeccionado en su beneficio.
Lo cierto es que se espera que la de este 2 de junio, sea el proceso electoral más sucio en toda la historia de Campeche. Ante el repudio a la gobernadora, a sus candidatos y a su partido, Morena, no les queda más que emplear trampas y recurrir a todo tipo de estrategias para agenciarse sufragios en las urnas.
La única vacuna contra esos actos corruptos de la gobernadora Sansores y de sus mapaches, será el voto masivo por los candidatos que no sean leales a Layda. Evitar caer en sus trampas, no ceder a sus chantajes, y estar alertas para evitar robo de urnas por los grupos de choque operados por el Seso Loco. No basta con sólo depositar el voto en la urna. Hay que cuidarlo y denunciar todas las irregularidades de los esbirros de la gobernadora más corrupta que ha tenido nuestra entidad.
dapoxetine priligy uk However, the benefits and risks must be balanced