De personalidad gris, opaca e introvertida, el vocerito de la gobernadora Layda Sansores ha vivido siempre como una rémora de Gerardo Sánchez Sansores, alias “Seso Loco”…
Con denuncias penales en la Ciudad de México por corrupción, tráfico de influencias y desvío de recursos públicos en la Alcaldía Álvaro Obregón, inscrito por un año en el padrón de violentadores de género del Instituto Nacional Electoral, y con graves acusaciones de desviar cada mes al menos 350 mil pesos a nombre de su tía, Nallely Bacab Duarte, el director de la Unidad de Comunicación Social del Gobierno del Estado de Campeche, Walther —con h— David Patrón Bacab, es además de cínico, ridículo, alopésimo, tontejo y mentiroso, un perfecto ignorante.
Quienes lo conocen de hace tiempo saben de sus terribles complejos y traumas. De una personalidad gris, opaca e introvertida, ha vivido siempre como una rémora de Gerardo Sánchez Sansores, alias “Seso Loco”, sobrino de la corrupta gobernadora Layda Sansores, con quien hizo negocios por varios millones de pesos en la Alcaldía Álvaro Obregón, por los cuales fue denunciado penalmente por la alcaldesa Lía Limón y por la diputada Tania Larios.
Esta pequeña semblanza bastaría para evidenciar que la Chacha del Seso carece de perfil profesional, moral y humano para desempeñar el cargo que le confirió la senecta gobernadora Sansores San Román, pero como ya vimos, en un Gobierno de ineptos y corruptos, el sobrino es el rey.
Sus exvecinos en la Unidad Habitacional “Solidaridad Nacional” se expresan de él como todo un corruptazo. Conocieron a su familia desde hace años, y ahora ven cómo es que, gracias al Gobierno saqueador de Layda Sansores, pasaron de la clase media baja, a tener negocios, empresas y vehículos para ostentar de manera prepotente.
Una de sus prestanombres es su tía Nallely, hermana de su mamá Janet Bacab Duarte. Ella aparece como “administradora” de las paginitas Campeche Central, Top Campeche, U Jaajil La verdad, CPE News, Ah Kin Pech News, Noticias Espectaculares, Secretaría de Memes del Estado de Campeche y de otras creadas recientemente, por lo que recibe mensualmente del Gobierno de la inepta Layda Sansores 350 mil pesotes.
Si sumamos ese monto por los 35 meses de esta nefasta, inepta y corrupta Administración, tenemos que Walther, —con h— a través de su tía, ya percibió al menos 12 millones 250 mil pesos. Suficientes, claro, para repavimentar varias calles, y para tapar los socavones que provocan esos pésimos trabajos.
Para lo que no le alcanza, sin embargo, es para pretender que puede tapar las bocas de los ciudadanos que denuncian esos pésimos trabajos que evidencian también, la gran corrupción de este Gobierno.
¡Ah!. Walther es también malo y chechón. Le gusta ofender, difamar y calumniar, pero cuando se le responde en los mismos términos, acude a los tribunales a demandar por daño moral. Pero todas sus demandas han fracasado, pese al apoyo que recibe. Porque no tienen elementos sostenibles contra la verdad pura y llana.
Exacto, porque este corruptazo no tiene un pelo de moralidad.
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