Cerebro vacío

Hay mucha inconformidad popular, y por eso es que el pueblo no se está reprimiendo su libertad de opinar sobre todo lo que hace o publica su anciana gobernante…

Tremendo revuelo causó entre la población un aparentemente insulso video que subió la Tía Rata el pasado fin de semana, en que se le observa haciendo limpieza a una de sus lujosas y carísimas bolsas, en que la anciana calificó como “un desastre” el desorden que encontró, por lo que se dedicó a tirar a la basura algo de su contenido, principalmente sobres y papeles.

—“Así como está su bolsa —hecho un desastre—, así tiene a todo el Estado”, le comentaron los ingeniosos nativos del reino a su senecta mandataria, quien ya no atinó a responder nada, porque como bien ha confesado en otras ocasiones, todo lo que diga puede ser usado en su contra”, comentó don Memín, mientras leía divertido los otros comentarios de los cibernautas al respecto.

—“La gente tiene toda la razón del mundo, intervino doña Chela, no sólo porque tiene al Estado totalmente abandonado, en desastre, y sumergiéndose cada día más en el rezago y en la miseria, sino porque sigue sin dar señales de que verdaderamente quiere cambiar las cosas y ponerse a trabajar. Todo lo que hace, le sale mal, es el karma que está pagando por todos los abusos que ha cometido”, sentenció la exburócrata estatal.

Don Memín consideró que la gente está muy sensible.”Hay mucha inconformidad popular, y por eso es que el pueblo no se está reprimiendo su libertad de opinar sobre todo lo que hace o publica su anciana gobernante. Ojalá que no haga lo mismo que la Momia Guanajuatense, quien restringió los comentarios que pueden hacer en sus publicaciones en las redes sociales, ya que las mentadas de madre estaban a la orden del día”.

—“Qué bueno que el pueblo no se queda callado —expresó el poeta Casimiro— y qué esperanzador es observar que los comentarios críticos a todas las publicaciones de la Ruca Gacha, cada vez son mayoritarios en comparación con los perrobots y troles que tiene contratados su sobrino el Tarado sin Cerebro, para que la alaben y aplaudan todas sus babosadas. Ese tipo de cosas funge como un termómetro para evaluar el respaldo ciudadano del que carece la gobernante. El pueblo la repudia, y lo mejor es que se lo demuestra”, subrayó.

—“Y así como sólo tiene basura en su bolsa —remató don Memín—, así tiene su cerebro la ancianita de Palacio. Vacío y en completo desorden. Por eso estamos como estamos, y lo peor es que cada vez las cosas empeoran en perjuicio de todos los ciudadanos”, concluyó.