La gente está enojada porque sus impuestos no han servido de nada para servicios públicos, Hernández Rath
Escárcega enfrenta serios problemas de bacheo y de recoja de basura que tienen enojada a la gente, y es comprensible porque lo que han aportado como impuestos no ha servido de nada, aceptó su alcalde Juan Carlos Hernández Rath, y afirmó que urge una política de amor y preocuparse por la salud mental de las familias ante el consumo de alcohol y drogas que hay en el Municipio, pues el tejido social ya no está bien integrado.
Ante legisladores locales, afirmó que se aplicarán y serán más responsables en el tema de servicios públicos, “pero no queremos llegar con un látigo, sino hacer consciencia entre la gente de que si paga (impuestos) podemos ayudar, pues su pago será invertido en servicios sociales que a todos nos benefician”.
“Encontramos una Administración con el pueblo enojado, molesto, y ese enojo aparentemente es por el bache, por la basura, por la falta de luminaria y un parque que pareciera más una plaza como el zócalo, pero haciendo un análisis un poquito más allá de lo que se logra ver a simple vista, nos damos cuenta de que el enojo de la gente es porque aunque Escárcega ha crecido en calles, con baches, y lámparas, pero no todas funcionan, el tejido social estaba bien integrado y ya no”, afirmó.
El enojo, continuó el edil escarceguense, no es por el bache, ni por la lámpara, sino porque no se ha diseñado una política de amor a la gente, donde la proyección de la planeación esté orientada hacia la convivencia familiar, la cultura del deporte y la recreación como algo fundamental para la vida pública de una comunidad.
Aunque haya buenas calles, si no tenemos actividades recreativas ni hay lugares de esparcimiento de convivencia familiar, no nos va a servir de nada, porque va a haber una calle bonita con gente enojada, apuntó Hernández Rath.
“Los baches los vamos a reparar, las lámparas las vamos a poner, eso es obligatorio para la Administración, pero el enfoque tiene que ir un poquito más allá y preocuparnos por la salud mental de las familias”.
En Escárcega hay consumo de alcohol y de drogas, como en todos los Municipios, por eso queremos un presupuesto para invertir una parte en la convivencia familiar, en el tejido social como base fundamental de la felicidad en la familia y para volver a arrebatar una sonrisa como era hace muchos años, que aunque era un pueblito sin luces y sin calles, vivíamos muy felices, puntualizó.
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