EXPEDIENTE | CASO ELISEO PONE A TEMBLAR A MORENA

Si se confirman las versiones periodísticas de que el exalcalde mocista Eliseo Fernández Montufar está a punto de retornar a sus actividades públicas, el panorama político-electoral en Campeche tendrá una reconfiguración radical, mientras que el Gobierno represor y acosador de Layda Sansores habrá sufrido un doloroso revés que pudiera tener incluso consecuencias legales. Toda su campaña difamatoria no puede quedar impune.

Sin echar las campanas al vuelo ni dar por anticipado que Fernández Montufar marchará en caballo de hacienda rumbo a la gubernatura, pues las predicciones políticas no siempre son certeras y siempre ocurren imprevistos, hay que admitir sin embargo que la propia gobernadora de Campeche ha sido, desde hace tres años y medio, la principal promotora de la campaña de Eliseo. 

Es una de sus principales obsesiones, junto con Alito Moreno, y ha cometido tantas torpezas en sus pretensiones de meterlo a la cárcel, y con ello aniquilarlo políticamente, que el peso de sus malas acciones le va a caer encima, una vez que el exalcalde mocista se presente ante los medios a explicar su situación jurídica ya sin el temor a ser apresado, y entonces informe si va proceder contra su perseguidora, el fiscal, el consejero jurídico y el sobrino descerebrado que lo llegaron a catalogar incluso como un “asesino serial”.

Es innegable el peso político de Fernández Montufar. La sola publicación de la nota que adelantó su inminente regreso, luego de que se habrían desechado  las acusaciones en su contra, en que se registraron cientos o miles de comentarios de respaldo en las redes sociales, nos confirma que su arrastre sigue tan vigente como cuando aspiró a la gubernatura y obtuvo, en su calidad de candidato, más votos que Layda Sansores. Sin su alianza, la senecta mandataria no habría llegado al cargo, y es probable que esta sea una de las razones del profundo rencor que le profesa al exedil mocista.

Llama la atención que, a pesar del impacto mediático que generó la información sobre el caso Eliseo, ni la corrupta y vengativa gobernadora Layda Sansores, ni su delicadito y mentiroso asesor jurídico, Juan Pedro Alcudia, se atrevieron a tocar el tema en la reciente emisión del “Martes del Jaguar”. Es claro que ambos nefastos personajes conocen a la perfección la evolución del expediente contra Eliseo, y saben qué rumbo tomará el resolutivo. Si no se atrevieron a “desmentir” lo que ha circulado en las redes sociales, es porque carecen de elementos para hacerlo y porque no quieren quedar en ridículo cuando se haga oficial lo que hasta ahora solo se ha conocido por rumores o trascendidos.

Lo que es cierto es que las batallas legales de la anciana del Cuarto Piso y de su desviadito asesor jurídico de cabecera han tenido por destino la derrota. Han fracasado hasta ahora, en su pretensión de acabar con el líder nacional del PRI, Rafael Alejandro Moreno Cárdenas, tampoco han podido encarcelar a alguno de los funcionarios municipales mocistas en contra de quienes han integrado decenas de carpetas de investigación, ni pudieron doblegar a la alcaldesa Biby Karen Rabelo de la Torre, por lo que el tono de discurso en su contra ya se escucha menos agresivo.

En Morena tampoco han emitido algún comentario sobre el caso Eliseo, pero enterados seguramente del inminente resolutivo a su favor, se han esmerado en difundir encuestas a modo en que les conceden ventajas abrumadoras a sus aspirantes, e intentan opacar el peso político de sus restantes oponentes. Otorgarle por ejemplo, a Morena una tendencia de 42.3 por ciento, sobre el 26.2 por ciento que le conceden a Moci, nos confirma que el miedo no anda en burro, por lo que, además de mentir, deberían optar por encontrar estrategias más convincentes.

En Morena saben que su principal lastre en estos momentos en Campeche es la inepta gobernadora Layda Sansores. Ha sido una decepción absoluta desde el día de su toma de posesión. La radiografía que de ella ha presentado el secretario de Movimientos Sociales, Manuel Zavala Salazar no la ayuda en nada, pero sí confirma lo que los medios independientes publicamos todos los días respecto de su actividad como gobernante.

Layda Sansores es la principal activista de los partidos de oposición en Campeche. Todo lo que hace —designar como su secretario de Economía a Lavalle Maury, darle poder absoluto a su sobrino Seso Loco, solapar todas las corruptelas de Marcela, los abusos que ha cometido contra expolicías, la persecución a periodistas, etcétera— va en detrimento de su partido, y multiplica el repudio en su contra, para favorecer a las agrupaciones partidistas que se oponen a ella. 

Y ante la inacción del resto de los partidos opositores —un panismo entregado y vendido y un priísmo desorientado por la inexperiencia de sus imberbes dirigentes— ha sido Movimiento Ciudadano el que ha sabido capitalizar los yerros de la gobernadora. Con diputados, autoridades y dirigentes perseguidos por la represora Layda Sansores, los mocistas se han sabido victimizar y agenciarse las simpatías de esa ciudadanía que siempre respalda al débil y repudia las injusticias.

Por eso es que la segunda fuerza opositora en Campeche es Movimiento Ciudadano, y por eso es que uno de sus principales exponentes, el excandidato Eliseo Fernández Montufar sigue tan vigente en el afecto de la gente. Es uno de los enemigos más odiados por Layda y se mantiene como el adversario a vencer en caso de que se lance de nueva cuenta en pos de la gubernatura. Una vez, claro, que se confirme que han sido desechadas todas las acusaciones en su contra. Algo que ocurrirá según los enterados, en los próximos días.