El mercado de Izamal, uno de los lugares icónicos de la gastronomía yucateca, ha alcanzado reconocimiento nacional e internacional, expresa con orgullo doña Valeriana Chin Uitz, quien por más de 30 años ha cautivado el paladar de quienes visitan la ciudad amarilla de Yucatán.
“Lo tradicional es el relleno negro, ya sea en salbute o en servicio de relleno negro, pero el salbute es lo más tradicional. Cada persona hace diferente su relleno negro, hay unos que lo hacen espeso, hay quienes lo hacen aguado, hay mucha diferencia, pero la verdad muchos clientes dicen que el relleno de mi puesto es el mejor, que tiene muy buen sazón”.
Doña Valeriana y su esposo son de los pocos locatarios que lograron mantenerse durante la pandemia, aunque fueron afectados por el cierre que en su momento ordenó el Gobierno.
“Nos afectó mucho porque la gente no tenía trabajo, no salía a comer, la gente no compraba, estuvimos así casi un año, más o menos, ya después la gente empezó a trabajar”.
Hubo un tiempo en que todos los puestos cerraron, menos lo que vendían comida, pero como no había trabajo, uno no vendía también, enfatizó.
Recalcó que sus ventas no son por el turismo internacional. “El turismo internacional, ese no nos compra nada, me compra más el nacional, ¡ese sí! Les invito a visitar Izamal, principalmente la iglesia, porque gracias a la iglesia vive Izamal”.
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