Tribuna Campeche

Diario Independiente

El reportero Abraham Martínez Caamal encaró a los policías estatales, quienes sólo argumentaron que tenía polarizado prohibido, y denunció ser un perseguido político del Gobierno de Layda Sansores.

Continúa represión de Layda

Detienen policías al periodista crítico Abraham Martínez y le quitan camioneta

Como si se tratase de un delincuente y sin importar que iba con su familia, más de 10 policías, entre estatales y federales, rodearon el vehículo del llamado “Reportero del crimen”, Abraham Martínez Caamal, para despojarlo de su camioneta en la avenida Gobernadores, a la altura del Barrio de Santa Ana.


El periodista lo calificó como nuevo acto de intimidación y represión, por ser conductor de uno de los medios de comunicación críticos contra la gobernadora Layda Elena Sansores San Román, y de la secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC), la guanajuatense Marcela Muñoz Martínez, quien cuenta con los peores resultados de seguridad en Campeche.


Los hechos sucedieron alrededor de las 22:30 horas del sábado, cuando intempestivamente patrulleros estatales y de la Guardia Nacional interceptaron a Martínez Caamal, quien se trasladaba junto con su familia a bordo de la camioneta Ford Lobo azul. Lo rodearon en la avenida Gobernadores al pasar el cruce con la calle Ecuador.

El reportero Abraham Martínez Caamal encaró a los policías estatales, quienes sólo argumentaron que tenía polarizado prohibido, y denunció ser un perseguido político del Gobierno de Layda Sansores.


El reportero encaró a los agentes por la detención, y denunció ser un perseguido político del Gobierno que encabeza Layda Sansores, quien -afirmó-, no tolera la crítica a sus presuntos actos de corrupción e impunidad, y usa a la policía para amedrentar a sus opositores.


Algunos policías estatales, en actitud prepotente, trataron de evitar que otros reporteros grabaran el hecho.


“¡Esto es persecución por parte de la secretaria Marcela Muñoz, es un abuso!, los policías lo saben, lo único que debieron hacer era infraccionarme, no tenían que tratarme así, y menos viendo que vengo de cenar con mi familia”, protestó el afectado.


Al final, los oficiales le quitaron la camioneta para mandarla al corralón, supuestamente por tener polarizado no permitido por ley, pero en ningún momento verificaron

¡Comparte esta nota!